La Revuelta debía ser la gran apuesta de TVE para tomar el liderazgo del exitoso El Hormiguero y, durante un tiempo, lo logró. En los últimos meses, sin embargo, la burbuja se ha desinflado y el fiasco ha sido importante. De hecho, ahora necesita un invitado extremadamente bueno para acercarse mínimamente a Pablo Motos… Las hormigas han recuperado el trono en la televisión española y, cada vez con más frecuencia, esto también se refleja en los resultados catalanes.
De hecho, se ha vuelto a demostrar en las audiencias de este lunes. En Cataluña, TV3 sigue arrasando en el prime time gracias a la segunda temporada de Vintage. La serie de boomers que protagonizan Abel Folk y Lluís Villanueva gusta muchísimo y, prueba de ello, es el buenísimo resultado que han obtenido. Con un 16,1% de cuota de pantalla, han sido el programa más visto de la noche. Queda claro que hace gracia ver las aventuras de Genís en sus citas de Tinder o la relación de Paco con Rita, la madre de Xusa.

¿Qué audiencia han hecho La Revuelta y El Hormiguero en Cataluña este lunes?
Mientras tanto, como decíamos, a la misma hora La Revuelta tocaba fondo con un 7,7% de share que lo acerca peligrosamente al 7,1% que obtenía el concurso Cifras y letras de La 2 (7,1%). Hablamos de un batacazo importante, ya que la entrevista a Jorge de Frutos no interesó a mucha gente. Por delante, también la enésima visita de Laura Pausini a El Hormiguero que alcanzó un muy buen 12,3%.
El espacio de David Broncano, pues, solo puede presumir de haber superado el resumen de Supervivientes que emitió Telecinco (con un 6,1%) antes del cine en el que la cadena se hunde al 3,3% de cuota.


¿Y en la televisión española? Allí también se llevó la victoria Pablo Motos, pero con aún más diferencia porque logró un 19,2% espectacular que dejaba en ridículo el 11,4% de La Revuelta. Tener a la cantante italiana le ha ido muy bien porque ha congregado a más de dos millones de telespectadores, quienes han sintonizado un espacio que celebraba su programa número 3.000. No pierden el tono, aunque pasen los años. Mucho tendrá que mejorar su rival más directo si realmente quiere acercarse otra vez a sus resultados.

