David Bustamante ha sido el último invitado de El Hormiguero, un programa al que ha acudido varias veces y en el que siempre pone de manifiesto su buena relación con Pablo Motos. El exitoso cantante, que llegó a la final de la primera edición de Operación Triunfo, ha querido aprovechar este escaparate para responder a los críticos y para revelar algunos detalles de su vida privada. ¿Entre ellos? Cuál es su manía más loca o cómo vive que siempre le estén criticando por sus cambios de peso constantes.
Lleva muchos años encadenando una actuación tras otra, unos conciertos que le dan la vida y que le hacen muy feliz. Como tantos otros artistas consagrados, él también confiesa tener ciertas manías extrañas antes de salir a cantar. Si no las cumple, sabe que las cosas no saldrán bien… ¿Y cuáles son esos rituales? Él mismo lo revela: «Cada vez tengo peores manías. Por ejemplo, siempre pido que me pongan un cartel en el primer escalón que tengo que subir donde pongan con qué pie debo pisar para llegar al escenario con el pie derecho«.
De esta manera avisa a los navegantes… sobre todo ahora que está preparando la gira que comenzará muy pronto. Por primera vez, cantará en varios teatros de España. Esto le tiene entusiasmado porque cree que cambiará la experiencia de ir a verlo cambiado: «A un teatro vienen a escucharte, no a verte como hacen en un concierto».

David Bustamante habla de los problemas de salud que ha tenido que superar
En otro punto de la entrevista, David Bustamante ha confesado que ha sufrido de las cuerdas vocales toda su vida y que le ha costado mucho saber qué había detrás. Sorprendentemente, han concluido que la culpa la tenían las malas digestiones que hacía: «Cuando tienes reflujo, como mi cuerpo, se te queman las cuerdas vocales con la acidez del estómago». Es por este motivo que se obliga a sí mismo a comer bien, ya que comer picante puede destrozarlo: «Hay alimentos que pueden afectar mi manera de cantar, así que los he tenido que eliminar de mi dieta«.
¿Echa de menos algunos de estos alimentos? Pues parece que sí, si hacemos caso a lo que ha explicado: «Lo que más echo de menos es un buen cocido, unos escarpines al Cabrales… No es que no pueda comerlo, pero tiene que ser muy de vez en cuando. Ahora lo que quiero es mantenerme en forma para poder hacer bien lo que más me gusta, que son mis conciertos». Y es que, últimamente, había vuelto a engordar mucho.
David Bustamante ha experimentado, desde que lo conocemos, unos cambios de peso muy drásticos. Para intentar mantenerse, ha optado por hacer un cambio de rutina radical: «Duermo poco, ya que siempre estoy despierto antes de las seis sin querer. Ahora lo que hago es levantarme, salir a caminar en ayunas e irme a entrenar. Por la noche, vuelvo a hacer una hora o una hora y media de cardio sea jugando al tenis, pádel o algo divertido». Pero no todo es hacer deporte, ya que la dieta también se tiene que cambiar. Ahora le han recomendado que no coma casi nada de hidratos, ni harinas, ni azúcares, ni alcohol.

Ahora que cuida su estómago y ha abandonado los reflujos, reconoce que encuentra su voz «mejor que nunca». Todo está conectado, queda claro. ¿Y qué piensa de todos aquellos que lo critican tanto por sus cambios físicos? David Bustamante no se ha contenido: «No hablan de mi peso por mi bien. Simplemente, cuando ven a alguien débil le ponen un pie en el cuello para que no levante la cabeza y eso es muy cruel. No hay nada más ruin que refugiarse en las redes sociales para hacer daño a una persona que tiene sentimientos«.