Drama en
Jan, ganador de la competición a dos con la que ha empezado la gala
El programa ha empezado con Jan y Natàlia jugándose la continuidad en el programa, dos concursantes que han pasado toda la semana en la zona de peligro y que pisaban el escenario nerviosos y emocionados: «Estamos en shock, esta ha sido una situación difícil de gestionar por culpa del nerviosismo que hemos arrastrado». La diferencia vocal entre ellos era abismal, con un Jan muy superior a la rival tal como ha demostrado el 67% de los votos que ha obtenido contra el 33% de ella.
Lo más fuerte ha sido que el jurado ha quedado maravillado con su actuación, hasta el punto de coincidir que se merecía ocupar la silla de favorito: «Tu virtuosismo es la sencillez. La voz te temblaba y me ha hecho emocionar tu fragilidad», le han dicho. Pasar de casi abandonar el concurso a ser favorito en solo cinco minutos no había pasado nunca.

Actuaciones muy buenas y una favorita que no se lo merecía
A partir de aquí, el programa ha continuado con el
En cuanto al resto de actuaciones, han destacado la potencia de voz y la buena actitud de Carla; que ha sido recompensada con los gritos del público que pedían que la hicieran favorita. Sorprendentemente, los miembros del jurado han considerado que no se lo merecía. Quién ha ocupado la silla durante más tiempo ha sido Elena, que la semana pasada acaparaba todos los titulares al hacer un alegato a favor de la talla 42. En esta ocasión tenía delante un reto mayúsculo, tener que interpretar
Clàudia tenía que interpretar la nueva canción de la Scorpio, exconcursante de la primera edición de

Alegato feminista de Sofía en su peor canción
La peor de la noche, claramente, ha sido Sofia. El descontrol en los agudos era muy evidente, así como todas las veces que ha desafinado en la que ha sido su peor actuación desde que ha empezado su concurso. Al acabar, ella misma reconocía que le daba mucha rabia lo que había hecho porque en los ensayos lo había hecho genial. El jurado ha agradecido su sinceridad y ha dejado claro que también se habían dado cuenta de que no lo había hecho bien, pero la sorpresa ha sido que decidieran salvarla «por la trayectoria hasta esta gala». Esta decisión no ha gustado nada, teniendo en cuenta que no se entiende que la peor de la noche ni siquiera haya sido nominada. Un escándalo.
De Sofía se ha comentado mucho su

Nominaciones injustas y una expulsión inexplicable
Después de todas las actuaciones, el jurado consideraba que tenían que estar nominados Tomàs, Alèxia y Carlos. Los tres tenían que hacer frente a tres canciones que no eran de su estilo, un hándicap que no les ayudaba a mostrar su mejor versión. Carlos se merecía ser el expulsado de estos tres, ya que la voz le ha fallado y no ha estado nada fino. Si lo han acabado salvando los
Alèxia, por su parte, ha tenido momentos muy buenos durante la actuación y también otros malos. Le han puesto en esta situación porque creen que no lo ha aprovechado… una nominación a la que tampoco le han encontrado mucho de sentido. Tomàs, por su parte, se enfrentaba al reto de cantar un tema en catalán cuando él solo hace un año y medio que lo habla. Ha estado muy nervioso y no ha interpretado mucho, todo el rato sentado en una silla.
Ha sido en este momento cuando el VAR musical ha decidido que se uniera a los nominados Emmi, ya que consideran que ha tenido «un desajuste tímbrico» cuando hacía el coro y que esto no se puede perdonar. Ella no ha ocultado su enojo, puesto que asegura que en los ensayos lo hizo igual y nadie le dijo que lo estaba haciendo mal. La sorpresa ha sido que han asegurado que su compañera Jim, la preferida de la noche, también habría estado nominada por el mismo motivo si no fuera inmune. Con Carlos salvado, los profesores decidían por sorpresa que Tomàs continuara una semana más porque creen que «puede dar más».
El público ha manifestado que consideraban injusto que se tuviera que ir Emmi o Alèxia y los resultados de las votaciones han estado muy igualados. Con un 54% de los votos, finalmente era Alèxia la salvada. Emmi ha acabado siendo la eliminada de una gala en que no ha sido la peor que lo ha hecho, una injusticia que no ha gustado nada.

La audiencia estalla contra el jurado y la decisión final en Eufòria
Durante la gala ha habido errores técnicos de sonido con las segundos voces y la música con demasiado volumen, lo que algunos telespectadores han querido destacar en Twitter. Ahora bien, esta crítica ha quedado claramente relegada a un segundo plano teniendo en cuenta la indignación flagrante que han demostrado ante las decisiones del jurado y del VAR musical. El comentario «qué estafa de gala» refleja perfectamente qué ha pensado la gran mayoría del público. Muchos no entienden, además, que a las chicas se les exija un nivel de coreografía exageradamente más alto que a los chicos; una injusticia que han denunciado.
La audiencia ha quedado en un 21,1% de