Los Mossos d’Esquadra investigan la muerte del fundador de Mango, Isak Andic, como un posible homicidio, tras caer por la montaña durante una excursión en las cuevas de Collbató, el pasado 14 de diciembre. En ese momento, Andic solo estaba acompañado por uno de sus tres hijos, Jonathan Andic.
Según ha avanzado el País, el hijo del fundador de Mango es investigado por el Juzgado de Instrucción número 5 de Martorell. Las actuaciones están bajo secreto de sumario. En un principio, la muerte de Andic fue investigada como un accidente y la causa se archivó provisionalmente, pero ciertas incongruencias en las declaraciones del hijo de la víctima han abierto un nuevo escenario. De momento, no hay pruebas concluyentes contra Jonathan Andic.
Jonathan Andic no hará declaraciones
Fuentes cercanas a la familia han explicado que Jonathan Andic «no ha hecho ni hará comentarios sobre el fallecimiento de Isak Andic». Las fuentes mencionadas en diferentes agencias de información también han querido mostrar el «respeto» por las diligencias que se están practicando para aclarar la muerte del empresario y han expresado que se continuará colaborando con las autoridades competentes. «Este proceso terminará lo más pronto posible y se demostrará la inocencia de Jonathan Andic».

Cayó por un barranco
El fundador de Mango cayó al vacío unos 150 metros por un barranco de las cuevas de Collbató, en el macizo de Montserrat. Ese día, padre e hijo habían ido a hacer una excursión por unos caminos que ya habían recorrido otras veces. A la vuelta, fue cuando Isak Andic sufrió la caída. Los servicios de emergencia recibieron el aviso a las 12.39 horas del 14 de diciembre de 2024. Al llegar, encontraron el cadáver de un hombre de 71 años, que fue rescatado por la unidad de montaña de los Mossos.
De origen turco, Andic llegó muy joven a Barcelona. La primera tienda de la firma la abrió en 1984 en el paseo de Gracia. Fue el primer paso que lo condujo a levantar un imperio de la moda, con presencia en más de 100 países y cientos de tiendas en todo el mundo. El éxito de la empresa lo situó como el catalán más rico, con una fortuna de 2.700 millones de euros en 2023.