Junts ha anunciado que la Comisión de Garantías del partido tiene abierta una investigación interna por la denuncia de acoso sexual y psicológico que un exasesor ha presentado contra el eurodiputado Toni Comín. En un comunicado, la formación asegura que la comisión estudia imponer “medidas cautelares” a Comín y que, tan pronto como termine la investigación, “se tomarán las medidas que correspondan”. El nuevo escándalo que ha salpicado a Comín —que se suma a las acusaciones de irregularidades financieras en el Consell de la República y de quedarse con donaciones destinadas a los mossos arrestados por haber ayudado a Carles Puigdemont— ha obligado a Junts a reaccionar y complica el futuro del eurodiputado con el partido.
El partido explica que se ha “puesto en contacto con la persona afectada y al mismo tiempo también con el eurodiputado Toni Comín” y aclara que la investigación interna proseguirá en paralelo a la denuncia presentada por el exasesor ante el Comité Consultivo del Parlamento Europeo. “Confiamos en que se aclaren los hechos”, insisten desde Junts. “Queremos dejar claro que el proceso interno debe asegurar, por un lado, la protección a la persona denunciante y al mismo tiempo la presunción de inocencia del eurodiputado Toni Comín”. El denunciado relata “toqueteos, insinuaciones, interrogatorios sobre la vida sexual con su esposa y propuestas de tríos con otro hombre”. Y también denuncia “broncas repentinas” y amenazas constantes de despido.

Comín apunta a una nueva conspiración
Por su parte, Comín ha publicado un comunicado en sus redes sociales para negar “con toda rotundidad” los hechos y ha anunciado que emprenderá las “acciones necesarias” para demostrar su “honorabilidad” ante las graves acusaciones del denunciante. “Habrá que valorar en qué medida esta denuncia en mi contra puede ser considerada constitutiva de un delito de odio por homofobia, es decir, un atentado contra mi integridad moral por motivo de mi orientación sexual”.

El eurodiputado ha intentado justificar que “algunos de los hechos a los que hace referencia la noticia se refieren, de manera completamente tergiversada, a bromas y comentarios más o menos oportunos, en el marco de una relación de confianza y amistad construida durante el mandato”. También insinúa que la denuncia, que califica de “falsa”, ha salido a la luz porque se presenta a las elecciones para presidir el Consell de la República.
Comín, que asegura tener “plena confianza” en la investigación abierta en el Parlamento Europeo, sostiene que el denunciante nunca fue su asistente y que no ha tenido “ningún vínculo legal”. Según su versión, después de mucha insistencia, accedió a dejarlo participar en las reuniones de coordinación semanales de sus asistentes durante el mandato pasado y se incorporó como voluntario a su equipo de campaña para las elecciones europeas de junio de 2024.