El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha dado por hecha la amnistía y ha reclamado al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que, si quiere ser investido presidente español, se comprometa a negociar durante la nueva legislatura española (2023-2027) «la fórmula» para resolver el conflicto político con el estado español y permitir un referéndum de autodeterminación. Aragonès ha apuntado que el conflicto político no es de «convivencia» ni «de ensambladura» o «acomodación», y que, por lo tanto, no se puede resolver hablando de «reencuentro», o con «buenas palabras» ni un «talante más abierto». En este sentido, ha pedido al PSOE «valentía, decisión, generosidad y democracia».
En el inicio de curso parlamentario, Aragonès ha dejado claro que el próximo gobierno español tiene que abrir «esta puerta» si quiere contar con el apoyo de los partidos independentistas y ha instado Sánchez a «tomar nota» y «permitir en Cataluña fijar las condiciones para votar» porque «no basta con presentarse con el espantajo del retorno de la derecha y la extrema derecha». En este sentido, ha avisado que «sería un grave error no aprovechar la oportunidad que nos han brindado las urnas» y ha remarcado que «como presidente estoy preparado y no escatimaré esfuerzos para salir adelante la resolución del conflicto y la resolución del conflicto pasa porque Cataluña vote». «Por mí esta es la condición que el independentismo tiene que poner encima la mesa», ha subrayado.
«Los grupos independentistas tienen la clave de la gobernabilidad del Estado y hay que utilizarla para conseguir el compromiso que Cataluña vote», ha dejado claro al inicio del debate de política general en el Parlamento, que se ha iniciado hoy y se alargará hasta viernes. «Amnistía y autodeterminación, democracia y libertad» y, en esta línea, el presidente de la Generalitat ha reivindicado su propuesta de Acuerdo de Claridad -que presentó ahora hace un año, en el debate de política general del 2022-, como herramienta para resolver el conflicto a partir de un referéndum.

Recibir a Puigdemont y a Rovira en Palau
Por otro lado, ha dado por hecho la amnistía y ha asegurado que «será una realidad», pero ha destacado que la medida de gracia «no es el punto final, es el punto de partida» de la negociación con los socialistas españoles por facilidad la investidura del líder del PSOE. «Con la amnistía en camino, ha llegado la hora para abrir para que Cataluña decida su futuro de Cataluña como nación», ha dicho, y ha añadido que es un reclamo que Cataluña está pidiendo desde el 2012 y ahora, segundos él, «tenemos la oportunidad de abrir y entrado en la negociación y en la coyuntura de hoy».
Pere Aragonès ha insistido a lo largo de su discurso que la medida de gracia para «acabar con la represión» será «un hecho» porque «defender la democracia no es ningún delito» y, en este sentido, ha dicho que en los próximos meses espera «poder recibir en el Palau de la Generalitat el presidente Puigdemont, Marta Rovira y el resto de exiliados y exiliadas como lo hice con los presos y presas políticas». «Los podremos recibir porque estamos haciendo todo lo posible a poner fin a seis años de exilio», ha resaltado.
Mensaje a Feijóo
También ha aprovechado el inicio de su discurso para fijar posición respecto de la investidura que se discute en el Congreso desde este martes con el candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, como protagonista. Dos horas antes del inicio del debate a Madrid, Pere Aragonès ha incidido que “Cataluña es y será decisiva” y tiene “la clave de la gobernabilidad del Estado” desde el 23-J. “Cataluña frenó la derecha y la extrema derecha a las elecciones de finales de julio. Por eso esta semana el señor Núñez Feijoo fracasará, porque Cataluña lo ha derrotado”, ha remachado.