ERC ha avanzado que la Europol modificará la metodología para elaborar los informes sobre terrorismo en la Unión Europea a raíz de la polémica inclusión del independentismo catalán entre los grupos “más activos y violentos” del estado español. Según ha explicado la eurodiputada Diana Riba, que se ha reunido con varios miembros de la Europol, entre ellos su directora, Catherine De Bolle, la agencia policial europea tendrá un grupo de expertos en terrorismo para “contrastar” la información que aportan los estados y que hagan de “filtro” para evitar que el informe se pueda utilizar para señalar a la oposición y la disidencia política.
Riba ha salido “satisfecha” de las reuniones, en las cuales se ha abordado el cambio de metodología, que tendrá “diferentes niveles de complejidad” para elaborar el informe y el grupo de expertos solo será uno. También se exigirá que los estados argumenten con “hechos, sentencias judiciales y acciones concretas” las informaciones que aporten para elaborar el informe. La eurodiputada ha asegurado que la Europol detallará la semana que viene todos los cambios que tiene previsto introducir. La agencia policial europea tiene la voluntad de “buscar mecanismos serios” para confeccionar el informe y “separar conceptos”, según Riba.

El Europol culpa al estado español del polémico informe
ERC reclamó reunirse con la Europol después de que la agencia policial incluyera al independentismo catalán y vasco en el informe ‘Tendencias y situación del terrorismo de la Unión Europea 2023’, donde se los señalaba como los “más activos y violentos” del estado. A raíz de la polémica, que se coló en las negociaciones de investidura de Pedro Sánchez, el Europol actualizó el documento, pero mantuvo la mención en el apartado de extremismo. El director ejecutivo del Europol, Jean-Philippe Lecouffe, se lavó las manos y aseguró que son los estados quienes envían los datos y las informaciones que se incluyen en el informe. “Nosotros no tenemos que calificar los hechos”.
Después de la publicación del informe, Riba pidió una reunión con el comisario de Justicia, Didier Reynders, y la directora de la Europol para elevar una queja por el hecho de que el documento “criminalizara un movimiento político legítimo y pacífico”. El grupo de los Verdes, del cual forma parte ERC, había reclamado desde el grupo de escrutinio del Europol del Parlamento Europeo modificar la metodología del informe para evitar polémicas similares.