El PP ve con satisfacción como el presidente español, Pedro Sánchez, tiene que sudar para negociar cualquier ley que puerta en el Congreso. La endemoniada aritmética parlamentaria que sostiene el gobierno español —con seis o siete partidos a convencer cada vez— no deja de dar disgustos al líder socialista, que encara el segundo año de legislatura con un balance más bien pobre: sin presupuestos, con solo 12 leyes aprobadas y 35 derrotas parlamentarias. Los populares no dejan escapar ninguna oportunidad de hurgar en la debilidad del PSOE y ya auguran elecciones generales para 2025. “El gobierno español está agotado y paralizado”, ha espetado el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en una entrevista en Telecinco.
La dificultad de aprobar el techo de gasto por el año que viene —Junts ya ha dicho que volverá a votar en contra si no hay cambios sustanciales— pose en peligro los presupuestos del 2025. Sánchez ya renunció a aprobar los del 2024 por la convocatoria de elecciones en el Parlamento y ahora ve cómo se le complican los del año próximo. Dos años sin presupuestos harían casi imposible continuar con la legislatura. A pesar de los esfuerzos de PSOE y Sumar para transmitir tranquilidad, incluso sus socios parlamentarios empiezan a ver con preocupación la parálisis legislativa, condicionada en gran parte por las exigencias de Junts. “Sin presupuestos, sin capacidad de echar leyes adelante y en clarísima minoría” es muy difícil que “pueda aguantar más de un año”, ha vaticinado el dirigente popular.

Una derrota que no es como las otras
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, tampoco ha desaprovechado la oportunidad de meter el cuezo y cree que Pedro Sánchez está “francamente preocupado” por la debilidad de su gobierno. Un cambio de voto de Juntos a última hora tumbó la propuesta de ley para regular los alquileres de temporada, que ni siquiera se podrá debatir en el Congreso. A pesar de que desde Moncloa le restan trascendencia porque era una iniciativa de Sumar, el hecho es que 35 derrotas en el Congreso en poco más de un año de legislatura pesan demasiado. Los partidos independentistas catalanes y vascos tampoco lo ven claro. La portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, ha sido la última a reconocer que el futuro la legislatura se ha “complicado” y ha pedido “responsabilidad” a los socios de investidura para aprovechar la oportunidad que el Congreso reconozca que España es un estado “plurinacional”.
La sensación al PP es que las negociaciones para los presupuestos del 2025 serán un momento decisivo de la legislatura. Juntos, que después de la investidura de Salvador Isla no tiene ningún bastión de poder importando en Cataluña, solo tiene el Congreso para recuperar la iniciativa política y preparar el próximo ciclo electoral de aquí a tres años. A finales de julio votaron contra el techo de gasto —el primer paso del complicado trámite parlamentario para aprobar unos presupuestos— y Carles Puigdemont ya ha avisado que no tienen ningún incentivo para aprobarlo cuando se vuelva a votar en el Congreso la próxima semana. Los populares hace tiempos que alertan que, sin presupuestos, Sánchez está “tocado y hundido” y los hechos de los últimos días no hacen más que añadir presión al dirigente socialista.
La financiación autonómica, nuevo campo de batalla PP-PSOE
El vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local del PP, Elías Bendodo, ha avisado Pedro Sánchez que no conseguirá dividir los presidentes autonómicos populares con “chantajes y sobornos” sobre la financiación autonómica. El presidente español ha empezado una ronda de reuniones con todos los presidentes autonómicos para empezar a hablar del nuevo sistema de financiación, un debate que está muy marcado por el pacto de financiación singular entre el PSC y ERC que el PSOE tiene que honorar si quieren contar con el apoyo de los republicanos en Cataluña. Los populares no quieren sentir a hablar de financiación singular. “No aceptaremos ni Españas multe-nivel ni el pacto del embudo: ancho para el independentismo y estrecho para el resto de comunidades autónomas”, ha dicho Bendodo.