Las críticas de algunos miembros del gobierno español en funciones a Israel por la ofensiva en Gaza después del ataque de Hamás del pasado 7 de octubre y la posterior censura de la embajada israelí a algunos ministros ha provocado un choque diplomático entre Madrid y Tel Aviv. La Embajada de Israel en España ha acusado a miembros del gobierno español de estar alineados con el “terrorismo tipo ISIS” y, en uno comunicado, les ha acusado de «poner en peligro» la seguridad de los judíos en España. La embajada no hace referencia explícita a ningún miembro del ejecutivo de coalición y se limita a hablar de «algunos elementos», pero en el trasfondo hay el rechazo frontal a las declaraciones de algunos ministros en apoyo a Palestina y en denuncia de las represalias israelíes después del ataque del 7 de octubre pasado.
En efecto, el pasado sábado, la líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales en funciones, Ione Belarra, hizo un llamamiento a la movilización en las calles contra el «genocidio planificado» de Israel sobre Gaza y pidió que la UE deje de ser «cómplice de un criminal de guerra como Netanyahu» y desplegara todos los esfuerzos diplomáticos para acabar con «la ocupación y el apartheid por parte de Israel sobre Palestina». También la vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones y líder de Sumar, Yolanda Díaz, condenó «alto y claro el apartheid israelí», mientras que el ministro de Consumo, Alberto Garzón, calificó de «pura barbarie» las acciones del ejército de Israel.
La embajada considera estas declaraciones «absolutamente inmorales» y, además, considera que «también ponen en peligro la seguridad de las comunidades judías» del Estado español al exponerlas «en el riesgo de un mayor número de incidentes y ataques antisemitas». Es por eso que pide directamente al presidente español en funciones, Pedro Sánchez, que «denuncie y condene inequívocamente estas vergonzosas declaraciones».
Belarra insiste
Después del comunicado de la Embajada en España, Ione Belarra ha contraatacado con un mensaje en Twitter en el que ha insistido que el gobierno de Netanyahu está llevando a cabo «crímenes de guerra a la Franja de Gaza, bombardeos masivos, cortes de agua y luz, no dejan entrar ayuda humanitaria». «Denunciar este genocidio no es ‘alinearse con Hamás’, es una obligación democrática. El silencio, complicidad con el terror», ha sentenciado.
Exteriores defiende a los ministros
El gobierno español también ha salido al paso del comunicado de la Embajada de Israel y ha rechazado de forma rotunda las «falsedades» abocadas por la embajada de Israel. De hecho, el ministerio de Asuntos exteriores ha respondido a la Embajada que «no acepta insinuaciones infundadas» sobre los miembros del el Ejecutivo de Pedro Sánchez y remarca que «cualquier responsable político puede expresar libremente su posición en una democracia plena como es España».

Aun así, deja clara la postura del gobierno español ante el conflicto entre Hamás e israel: «La posición en conjunto respecto a los ataques terroristas perpetrados por Hamás es clara: condena contundente, exigencia de liberación inmediata e incondicional de rehenes y reconocimiento del derecho de Israel a defenderse dentro de los límites marcados por el Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario».
Finalmente, pone énfasis que el gobierno español «en su conjunto» ha expresado «reiteradamente» la necesidad de distinguir la población palestina del «grupo terrorista Hamás, de proteger la población civil de Gaza y la necesidad imperiosa de mantener los suministros básicos indispensables para el bienestar de esta población».