La amenaza de un verano sin piscinas por la grave situación de sequía que vive buena parte de Cataluña podría no acabar de concretarse. El Govern está ultimando un decreto ley que permitirá llenar y rellenar piscinas públicas y privadas siempre que estas se abran a la ciudadanía. Así pues, los diferentes ayuntamientos podrán considerar ‘refugios climáticos‘ las piscinas de un club deportivo, de una comunidad de vecinos, de un hotel o un camping si están disponibles para el público en general y siempre que se compense el gasto de agua con otras medidas.
Según ha avanzado
«El decreto nace con la voluntad de entendimiento entre el Govern y los máximos representantes de municipios de todo el país para poder dotar a los gestores locales de más herramientas para la gestión de la emergencia por sequía sin menguar su autonomía municipal», señalan desde el ejecutivo catalán en unas declaraciones recogidas por la ACN, subrayando que serán los ayuntamientos los encargados de decidir qué piscinas censan como refugio climático en sus planes de emergencia por sequía.
Piscinas privadas abiertas al público
La previsión es que se puedan incluir dentro de la clasificación de refugio climático tanto las piscinas públicas como las privadas, a pesar de que estas segundas tendrán que llegar a un acuerdo con el consistorio que permita su uso a la ciudadanía, como podría ser una piscina privada de un club deportivo para casales de verano, una piscina comunitaria que se abre a otros vecinos o una piscina de un hotel o un camping que se pueda acceder pagando una entrada. «Las piscinas censadas como refugio climático podrán rellenarse en las cantidades indispensables para garantizar la calidad sanitaria del agua, siempre que se apliquen medidas de ahorro adicionales que compense el agua que se utilice», precisa el ejecutivo en este decreto.