Las medidas implementadas por el Departament d’Educación, capitaneado por Anna Simó, a raíz de la firma del pacto contra la segregación escolar del año 2019 han permitido reducir un 20% los niveles en toda Cataluña. Esta es la conclusión que ha obtenido el último informe del síndico de agravios, que valora como se han desarrollado los acuerdos establecidos para reducir la segregación escolar entre la conselleria, las administraciones locales y los miembros de la comunidad educativa, presentado en la octava reunión de la Comisión de Seguimiento del acuerdo. Si miramos los datos con más precisión, la segregación escolar ha disminuido un 35% en términos intramunicipales. La síndica Esther Giménez-Salinas ha valorado muy positivamente el trabajo hecho en todos estos años, pero ha querido poner énfasis en la necesidad de impulsar una segunda fase para combatirla dentro de los mismos centros educativos.
En este sentido, se ha referido al “problema estructural del racismo” y ha valorado que para lograr la integración de las personas recién llegadas el primer paso es garantizarles una buena formación. Ha indicado que la escuela juega un papel clave y fundamental para que “el ascensor social” funcione de la forma adecuada: «Tenemos que trabajar a fondo la segregación, el racismo y también lo que significa el ascensor social», ha aseverado. A pesar de dejar claro que todavía queda trabajo por hacer, la síndica ha querido sacar pecho del trabajo hecho hasta ahora asegurando que «es un paso muy importante» para Cataluña.

Reducción de la segmentación
En el documento presentado este miércoles, la síndica ha comparado los datos del curso 2018/19, el año en que se firmaron los acuerdos, con las del curso anterior. Mientras que el curso 18/19 había que cambiar de centro al 43% del alumnado extranjero a primaria y al 35% a secundaria para garantizar una escolarización plenamente equilibrada, este año esta proporción ha sido del 33% a primaria y del 28% en secundaria. También ha puesto de relieve, sin embargo, que la escuela concertada ha incrementado más el alumnado extranjero que la pública.
Más allá de la reducción del porcentaje de segregación, el informe del síndico de agravios también considera que una de las principales carencias del sistema educativo es que siguen existiendo cerca de 250 centros catalanes guetizados, es decir, escuelas con una concentración muy elevada de alumnado con necesidades educativas específicas derivadas de situaciones socioeconómicas o socioculturales. “Las políticas de escolarización equilibrada son más efectivas para combatir los desequilibrios existentes entre centros dentro de un mismo territorio cuando no hay situaciones de guetitzación de centros fuertemente arraigados en el imaginario social de las familias que residen”, concluye.

