El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha alargado la mano a Junts per Catalunya en su réplica a Albert Batet y ha pedido a la formación independentista negociar unidos el referéndum. «Tenemos la oportunidad de dar un paso más allá en la hora de negociar con el estado español. Yo estaré con la mano extendida, tenemos el mismo objetivo», ha indicado Aragonés, que ha reclamado a Junts «dejar de mirar el pasado» porque, según ha dicho, «podemos dibujar una nueva etapa para compartir espacio a la tabla de negociación».
Aragonès, que ha recordado que Esquerra republicana siempre ha apoyado a las iniciativas impulsadas por Artur Mas, Carles Puigdemont y Quim Torra, ha remarcado que «estamos en un momento histórico donde podemos avanzar hacia la resolución política del conflicto con el Estado» y ha pedido que «no nos encallemos en quien». «Hace muchos años que, desgraciadamente, hemos sufrido muchas derrotas, y ahora es el turno de las victorias y tenemos la oportunidad de hacerlo en clave de resolución del conflicto», ha señalado.
En este sentido, ha instado a Junts a aprovechar «al máximo» la fuerza de los diputados y diputadas independentistas en el Congreso con toda su «ambición, unidad, generosidad», y «replanteando los instrumentos», en referencia a la tabla de diálogo. «Al final las mesas son herramientas, pero si coincidimos en el ‘qué’ y el ‘como’, tenemos que aprovechar la oportunidad», ha insistido el presidente.

Aragonès quiere una Cataluña «sin límites»
Pere Aragonès ha situado el Estado como un «límite» ante el potencial que considera que tiene Cataluña y ha defendido ante el líder del PSC, Salvador Illa, la celebración de un referéndum sobre la independencia de Cataluña. «Queremos un país sin límites. Los límites que tiene este potencial es el Estado porque no podemos disponer de nuestros recursos, defender nuestros intereses, y en muchos de estos debates globales, el Estado se nos pone como intermediario, sino como opositor», ha sostenido.
«Lo gran drama de España es que Cataluña avanza cuando los partidos catalanes condicionan el gobierno de turno. Imaginad qué autonomía más débil», ha recalcado Aragonés, después de pedir que el debate sobre la financiación catalana incida en el déficit fiscal así como que la ciudadanía decidáis qué proyecto quiere para su futuro. Así, ha asegurado que él aceptará el resultado de un referéndum y, mirando Illa, le ha dicho: «El que no sé es si estaría dispuesto a correr este riesgo».