Junts ha reaccionado con escepticismo al movimiento que el presidente español, Pedro Sánchez, ha hecho este martes para reconstruir los puentes con la formación independentista e intentar salvar la legislatura. Aunque el partido no se ha pronunciado oficialmente y se espera que lo haga en las próximas horas, fuentes de Junts han explicado a Ser Catalunya que su postura no ha cambiado y que esperan ver “hechos” antes de replantearse su relación con el PSOE y con el gobierno español. “Ha pasado de decir lo hemos cumplido todo a no hemos cumplido casi nada, pero ahora lo haremos todo”, señalan desde el partido de Puigdemont.
Sánchez ha concedido dos entrevistas –una en RAC1 y otra en el 2Cat, el canal en catalán de RTVE impulsado por Junts– en las que ha reconocido que el diálogo con la formación independentista está “roto” y ha asumido los “incumplimientos” de numerosos acuerdos, entre los cuales hay grandes temas como la amnistía, la oficialidad del catalán en la Unión Europea o el traspaso a Cataluña de la gestión de las competencias en inmigración, pero también cuestiones aparentemente más sencillas como la publicación de las balanzas fiscales. Con un tono más grave y compungido de lo habitual en él, el presidente español ha anunciado una serie de medidas reclamadas por Junts para intentar reconducir la relación y lograr que vuelvan a la mesa de negociación.

Entre las medidas anunciadas, destaca dar más flexibilidad para las inversiones de los ayuntamientos, ayudas a los propietarios de pisos por impagos de alquiler de jóvenes y familias vulnerables o la ampliación del plazo para implantar la facturación digital en las pequeñas empresas y autónomos. “Esto es algo que se le debe a Junts, que es quien lo exigió”, ha destacado Sánchez, que ha intentado en todo momento reconocer el papel “protagonista” del partido de Puigdemont en muchos de los avances de la legislatura. De hecho, el Consejo de Ministros ya ha pospuesto hasta el 2027 la entrada en vigor del sistema de facturación digital Verifactu, que debía aplicarse a partir del 1 de enero de 2026. La reacción de Junts, de momento, es de desconfianza.
El Govern reclama dejar de lado los “intereses partidistas”
La portavoz del Govern, Sílvia Paneque, ha celebrado el acercamiento de Sánchez a Junts y ha reclamado dejar de lado los “intereses partidistas” para recuperar la mayoría de la investidura y avanzar en “la agenda progresista” que ha liderado el ejecutivo español. “Esperamos que pongan los intereses de Cataluña por encima de cualquier otro interés y cuestión; que pongan el interés general por encima del interés partidista”, ha insistido. Paneque considera que las declaraciones de Sánchez deberían hacer que Junts y el resto de grupos parlamentarios hagan una “reflexión” para retomar el diálogo. “La continuidad del gobierno Sánchez es buena para Cataluña”, ha remarcado la también consejera de territorio.

Paneque ha recordado que la ruptura de Junts con el PSOE ya tiene consecuencias para Cataluña. Hace unos días, el voto en contra de Junts con el PP y Vox tumbó los objetivos de estabilidad del gobierno español para 2026, “lo que supone una pérdida de 1.000 millones para Cataluña”. Ahora espera que el movimiento de Sánchez sirva para revertir la situación y recuperar los canales de negociación entre las dos formaciones porque quedan muchos retos por afrontar, sobre todo en materia de vivienda, derechos sociales y seguridad. “Son muchos los datos y políticas que lo demuestran; y que se pueda mantener la mayoría de la investidura es bueno”, ha reiterado la portavoz.

