Camilo Blanes tiene a su madre muy preocupada. El hijo de Camilo Sesto ha publicado un montón de fotos con las piernas llenas de sangre, sin dientes y con la casa llena de suciedad. El chico ha entrado en una espiral de autodestrucción, tal como demuestran las instantáneas que comparte a través de su perfil de Instagram. Se ha sabido que ha comprado hormonas en el mercado negro, que se ha rodeado de malas compañías y que no hace caso a nadie. La madre ha explicado que ha intentado ayudarlo y que, incluso, habría intentado conseguir su tutela.
Lourdes Ornelas está «totalmente desbordada«, ha dicho en una conversación con un periodista de
Muchos de estos presuntos amigos del chico están aprovechándose de él y del dinero que tiene. La madre, desesperada, explica que denunció ante la policía a una persona que habría querido abusar de la confianza de su hijo: «Camilo está vulnerable. Si estuviera bien, no permitiría lo que está pasando porque ni siquiera sabe a qué se dedica este chico a quien conoce desde hace años». Este amigo malo del hijo habría permitido que sus perros le agredieran, le habría agredido verbalmente y habría robado a Camilo: «Quiero que lo deje en paz y que deje de hacerle daño«.
Camilo Blanes publica fotografías preocupantes en su perfil de Instagram
No sirve de demasiado lo que ella quiera, puesto que la ley no le permite hacer nada para impedir que su hijo tome malas decisiones porque es mayor de edad. El chico continúa en su burbuja, además, tal como evidencia en Instagram. Ha convertido su perfil en un escaparate de fotografías perturbadoras, en las que se le ve con muy mala la cara y sin ningún tipo de mejora en su estado. Ahora se hace decir Sheila Devil y ha empezado el proceso de hormonación o esto dice, puesto que no parece que esté tomando decisiones muy meditadas. Tiene la dentadura totalmente destrozada y no le da vergüenza compartir instantáneas en que se le ve la boca ensangrentada, así como otros en que demuestra que continúa fumando.
Su madre ha puesto el grito en el cielo a través de la televisión para intentar conseguir ayuda para su hijo, pero poca cosa más puede hacer. No quiere que le pase nada, pero va por el mal camino y queda claro que él no quiere cambiar de vida aunque esto lo ponga en peligro.