La Unión Europea (UE) hace meses que puso sobre la tabla que Ucrania, en plena guerra con Rusia desde hace más de dos años, se convirtiera en un nuevo estado miembro del ente comunitario. Para adherirlos, los estados miembro impusieron siete condiciones que Zelenski tenía que cumplir, y entonces empezarían los trámites para incorporarlos en la UE. Ahora bien, dentro de la comunidad política, no todas las opiniones son partidarias de adherir Ucrania. El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha levantado un veto a la incorporación de Kiev y ha amenazado, incluso, de bloquear el apoyo militar y económico a Zelenski. Es por eso que los líderes de la Unión Europea han cerrado filas este jueves en un llamamiento a la unidad para dar luz verde a abrir negociaciones de adhesión durante la cumbre del Consejo Europeo que se celebra en Bruselas.
Al llegar a la cumbre que se ha celebrado este mismo jueves, el canciller alemán, Olaf Scholz, ha defendido que es un «debate necesario» y ha recalcado la importancia de avanzar en los procesos de ampliación de Ucrania, pero también de Moldavia y los Balcanes, después de que el bloque haya confirmado su compromiso con la integración europea. «Es una señal necesaria que apoyamos a los ucranianos para cumplir las medidas que los hemos pedido», apunta Scholz. El líder alemán y el presidente francés, Emmanuel Macron, también han mantenido una conversación larga para intentar hacer cambiar de opinión a Orbán, pero sin un resultado favorable, a priori. El primer ministro húngaro mantiene su bloqueo a la adhesión: «Hemos fijado siete condiciones y la evaluación de la misma Comisión es que tres de las siete no se han completado, por lo cual no tiene sentido que negociamos», argumenta.

La confianza de los estados miembro
El primer ministro belga, Alexander De Croo, y el primer ministro finlandés, Petteri Orpo, consideran que es fundamental mantenerse unidos para conseguir la adhesión de Ucrania: «Si dejamos de mostrar unidad, puede darse a entender que no estaremos para protegernos los unos a los otros en tiempos difíciles y puede tener un impacto en la seguridad de Europa», asevera De Croo ante la negativa de Budapest de incorporar Kiev a la Unión. A pesar del bloqueo, pero, los estados miembro todavía confían a conseguir hacer cambiar de opinión Ucrania. De hecho, el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, está convencido que los líderes consigan resolver las diferencias en la cumbre tanto en cuanto a la revisión del presupuesto -para financiar la ayuda en Ucrania y la gestión migratoria-, como en materia de ampliación. Ahora bien, no será una cuestión sencilla de resolver.
La demanda de Zelenski
Por su parte, Zelenski reclama a los líderes de la Unión Europea que cumplan su palabra y «no caigan en la indecisión» para conseguir un acuerdo de apertura de negociaciones de adhesión con Ucrania, avisando que el contrario beneficiará al presidente ruso, Vladímir Putin: «Hoy es un día para tomar una decisión política en respuesta al que hemos conseguido. Se trata de abrir las negociaciones de adhesión con Ucrania y en marzo del año que viene, aprobar el marco de negociación para seguir adelante. Sin burocracia. Todo es muy claro», sentencia Zelenski, que añade que «es muy importante que Europa no vuelva a caer en la indecisión. Nadie quiere que Europa sea vista como poco digna de confianza. O como incapaz de tomar decisiones que ella misma preparó».