Ser padres no es fácil y eso lo saben los personajes de Com si fos ahir que han tenido o quieren tener hijos. Con los años, los problemas que ellos habían sufrido también comienzan a experimentarlos sus hijos, y saber gestionarlos forma parte de la misma experiencia. Esta temporada los guionistas han decidido incorporar dos tramas relacionadas con la maternidad desde dos perspectivas muy diferentes. Cristina (Carlota Olcina) fue madre hace 15 años con Quique (Biel Duran) de Adrià, un chico muy listo y carismático que estas semanas ha sido víctima de una trama complicada entre adultos incapaces de entender que él ya no es un niño pequeño. Por su parte, la chef de la Barnateca ha decidido embarcarse en la aventura de ser madre. Itziar (Mar Ulldemolins) quiere hacerse una inseminación artificial, pero ¿conoce todo lo que realmente implica traer una criatura al mundo?
Cristina y Quique, dos padres testarudos con una trama complicada
¿Cómo le explicas a tu hijo que tal vez no es tu hijo? Esta es la gran pregunta que se ha estado haciendo Quique todas estas semanas desde que supo que tenía un alto porcentaje de ser estéril. La desconfianza entre él y su exesposa ha estado presente más de una vez, con interrogatorios en la Barnateca, mentiras y excusas para sacarle un par de muestras de ADN de la boca del niño sin que él supiera nada. Adrià tiene 15 años y los espectadores de la serie de TV3 han visto que no es nada tonto y entiende lo que pasa a su alrededor. Después de escuchar un mensaje de voz en el que Quique preguntaba por la prueba de ADN que había encargado a Cristina, el niño hizo la gran cuestión, obligando a los padres a explicar qué estaban haciendo.

Aunque no fue la mejor reacción teniendo en cuenta que acusó a su madre de haberse liado con otro hombre -y algo de razón tiene-, Cristina y Quique se han dado cuenta de que más allá de sus dudas está la sinceridad. Ser padre es complicado y su hijo no se lo ha puesto nada fácil. Tras la gran revelación, el chico los dejó discutiendo quién de los dos había enredado la situación y se fue un par de días a casa de Miquel (Eduard Farelo) y Noe (Elena Gadel) para aclararse un poco y no estar cerca de ellos. Como era de esperar, su preocupación ha ido creciendo cada día y eso, en el fondo, no es más que una confirmación de que más allá de las discusiones sobre quién es o no es el padre biológico, hay un joven sufriendo por la falta de confianza de sus padres.

Solo necesitó una charla muy intensa con Miquel, que fue padre de Guillem con Noe, que ya tenía un hijo de una relación anterior, Èric. El discurso paternalista y emotivo le hizo entender que no importa quién sea el padre de sangre o no, porque ejercer de figura paterna a menudo es mucho más importante. ¿El resultado de todo esto? Una imagen de Quique y Adrià haciendo las paces temporalmente, como si no hubiera sido más sencillo hablarlo todo antes y no hacer una montaña enorme.

Itziar quiere ser madre
Ahora bien, uno de los giros inesperados de la temporada ha sido la decisión de Itziar (Mar Ulldemolins). La chef se caracteriza por ser una persona distraída, que va por la vida a toda prisa y que le cuesta responsabilizarse de las cosas porque su mente siempre va a mil. Al inicio de la temporada se enamoró locamente de Foix (Nausicaa Bonnín), una comercial de jugos. Un par de semanas compartiendo besos hasta que la chica la dejó tirada para volver con su ex. La idea para recuperar el rumbo de su vida ha sido pasar por un proceso de maternidad.

Después de hablarlo con Ivan (Roger Coma) con un hermetismo poco coherente en ella, acabó pidiendo a su jefa, Cristina, adelantarle dinero del sueldo para un supuesto tratamiento dental. En el fondo los necesitaba para someterse a una inseminación artificial, y algunas personas de su entorno no han terminado de verlo con buenos ojos. Uno de los personajes más escépticos ha sido Patri (Lua Amat), que conoce a la cocinera y sabe que sus ideas no siempre llegan a buen puerto. En todo caso, Itziar está muy decidida y ahora que ve que las personas empiezan a creer que quiere hacerlo, han decidido ayudarla.

Un libro de preparación con «todo lo que debes saber antes de ser madre» ha sido el detonante de todos sus miedos. Ha visto algunas de las consecuencias que sufre el cuerpo durante los nueve meses de embarazo y todas las ilusiones que sentía ahora se han convertido en miedos. ¿Y quién podría darle un consejo sobre maternidad? Justamente Cristina ha visto cómo su chef ponía sobre la mesa el libro que había leído, con todos los miedos que eso conlleva.

Itziar ha hecho ver que el libro era de una clienta -aún no quiere contar su secreto- y Cristina se ha sincerado con toda la dureza y honestidad posible de una madre cansada: ser madre es muy bonito, pero es un sufrimiento. Si eso la ayudará a pensárselo dos veces, no está muy claro, pero tal vez necesita averiguar realmente si esto es lo que quiere hacer a partir de ahora.

