El Institut d’Estadística de Catalunya (IEC) y el Departamento de Política Lingüística han publicado este jueves los datos territorializados de la Encuesta de Usos Lingüísticos de la Población 2023 que dieron a conocer el pasado mes de febrero. El informe constató que el catalán es la lengua habitual de menos de un tercio de la población, una cifra que no se registraba desde hace 20 años. Así, solo el 32,6% de los ciudadanos usa el catalán por encima de cualquier otro idioma, 3,5 puntos menos que en 2018, mientras que quienes tienen el castellano como lengua habitual son el 46,5%, dos puntos menos. Pero esto era una radiografía general del país y ahora se pone la lupa en los datos por territorios, que permiten hacer un análisis más detallado.
El desglose de los datos por territorios, analizado por la Agència Catalana de Notícies (ACN), muestra que las dinámicas son muy diferentes y constatan un hecho: el área metropolitana de Barcelona, la más densamente poblada del país, es la que arrastra a la baja las estadísticas, ya que la mayoría de las zonas restantes están por encima de la media. Así, las Terres de l’Ebre, las Comarcas Centrales y el Alt Pirineu son los territorios con más presencia del catalán; el Camp de Tarragona y el Penedès se sitúan en una zona intermedia, con más presencia de castellanohablantes, pero con el catalán por encima de la media y un peso destacado de personas que usan ambos idiomas; y el área de Barcelona con el número de catalanohablantes por debajo de la media.
Terres de l’Ebre, las Comarcas Centrales y el Alt Pirineu
Las Terres de l’Ebre, las Comarcas Centrales y el Alt Pirineu forman parte del grupo de territorios con más conocimiento y uso del catalán. Son zonas con más personas nacidas en Cataluña (alrededor del 68%) y un porcentaje de nacidos en el extranjero en torno al 20%. La población con el catalán como primera lengua era mayoritaria en el período analizado (2018-2023) en Terres de l’Ebre (57,7%) y en el Alt Pirineu (51,2%), mientras que en las Comarcas Centrales, el porcentaje se sitúa en el 48%.
Con todo, hay ciertas diferencias entre los tres territorios. Mientras que en el Ebro había un porcentaje destacable de otras lenguas (16,3%), en las Centrales y el Pirineo era más bajo (11,8% y 11,4%). En cuanto a la lengua de identificación, Terres de l’Ebre tenía un 56,3% de personas que se identificaban con el catalán, el Alt Pirineu un 52,8% y en Comarcas Centrales un 52,4%, mientras que con el castellano se identificaban el 14,8% de la población de Terres de l’Ebre, el 22,2% del Alt Pirineu y el 21% de Centrales.
Ponent y Comarcas Gironinas
Ponent y las comarcas de Girona son territorios con conocimiento y uso del catalán por encima de la media, con un porcentaje de nacidos en el extranjero superior al 25% y un porcentaje de uso de otras lenguas también por encima de la media catalana. En cuanto a la primera lengua, estos dos territorios destacaban por tener porcentajes más altos que la media del país respecto al catalán: 39,1% en la zona de Girona y el 45,4% en Ponent, y también de otras lenguas, del 17,3% en Girona y 20,1% en Ponent.

En cuanto a la lengua de identificación, el 40,3% de los gerundenses y el 46,9% de los habitantes de Ponent indicaban el catalán. El porcentaje de población que se identificaba con otras lenguas estaba alrededor del 12% en los dos territorios. El catalán era la lengua habitual del 45,1% en Girona y del 51,1% en Ponent, mientras que el porcentaje de población que usaba otras lenguas era del 7% en los dos territorios. Ponent se acercaría más al grupo anterior que las comarcas gerundenses en este aspecto.
Camp de Tarragona y Penedès
El tercer grupo lo forman el Camp de Tarragona y el Penedès, donde los datos mostraban porcentajes de uso más altos de castellano que de catalán, pero donde el catalán continuaba por encima de la media. En estos territorios, la proporción de nacidos en el resto del Estado (entre el 17% y el 19%) superaba ligeramente la media de Cataluña (16,7%) y el porcentaje de nacidos en el extranjero se encontraba cerca de la media en el Camp de Tarragona (23,5%) y por debajo en el Penedès (19,7%). En cuanto a la lengua inicial, el porcentaje de personas que tenían el castellano como primera lengua era del 48,8% en el Penedès y del 42,5% en el Camp de Tarragona, y el catalán era del 31,3% y del 35,1%, respectivamente.
En cuanto a la lengua de identificación, el catalán crecía como lengua inicial (32,7% en el Penedès y 37,2% en el Camp de Tarragona), mientras que en el apartado de la lengua habitual, el porcentaje de castellano se situaba entre el 40 y el 45% y el de catalán entre el 35% y el 38%. La tasa de personas que declaraban catalán y castellano como habituales estaba por encima de la media, entre un 10 y un 12%. En el Penedès se detecta una presencia de la opción combinada ‘catalán y castellano’ sistemáticamente superior a la media, por encima del resto del país.

Ámbito metropolitano
Finalmente, el último grupo es el área metropolitana, aunque muestra diferencias internas importantes. Es el territorio más poblado y el que acoge menos proporción de personas nacidas en Cataluña (56,6%), más población de nacidos en el resto del Estado (18,3%) y uno de los tres con más población nacida en el extranjero (25,1%). También se encuentra por debajo de la media de Cataluña en cuanto a conocimiento de la lengua, así como en cuanto a la población que tenía el catalán como lengua inicial única (22,3%), de identificación única (22,9%) y habitual única (24,7%).
Esta zona se puede dividir en tres grandes bloques. En primer lugar, el Maresme, el Vallès Oriental y Barcelona ciudad donde, en general, había unos porcentajes de conocimiento y uso del catalán superiores al del conjunto del área metropolitana. En el caso del Maresme, incluso superiores a la media del país. En un segundo grupo están el Vallès Occidental y el Baix Llobregat Nord, que presentaban unas dinámicas más parecidas a las del conjunto del ámbito Metropolitano, y el último grupo lo forman l’Hospitalet de Llobregat, el Barcelonès Nord y el Baix Llobregat Sud, donde el uso del catalán era mucho más bajo que en el conjunto del ámbito Metropolitano.


