Si el gobierno español y el de la Generalitat quisieran podrían pactar bilateralmente la financiación singular por Cataluña y el resto de territorios del estado, no podrían hacer nada. Así es, puesto que el ejecutivo estatal solo necesitaría el voto de una sola comunidad autónoma -que podría ser Cataluña- para validar al Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) un tratamiento singular en materia de financiación -tal como reclama Cataluña desde hace años- porque el Ministerio de Hacienda cuenta con el 50% de los votos dentro del foro multilateral, según explican en Europa Press expertos en financiación autonómica.
Ahora bien, el director de Fedea, Ángel de la Fuente, precisa que el Consejo de Política Fiscal y Financiera «no manda» directamente sobre el sistema de financiación autonómica, aunque sea un órgano importante, sino que el importante es el que se recoge en la ley de financiación autonómica. En esta norma, no se impide que haya negociaciones bilaterales en esta reforma, aunque después se tenga que someter a la votación del Consejo de Política Fiscal y Financiera, donde están representadas todas las comunidades autónomas.

Hay que recordar que al Consejo de Política Fiscal y Financiera es habitual que el gobierno español acabe ganando todas las votaciones, puesto que el Ministerio de Hacienda dispone de la mitad de los votos, mientras que los representantes de las comunidades y las ciudades autónomas dispongan cada uno de ellos de un solo voto. A pesar de que se pueda votar al CPFF, para reformar la financiación autonómica se tendría que aprobar una ley orgánica, que se sometería a la votación del Congreso y el Senado, donde el PP cuenta con mayoría absoluta y podría dilatar la tramitación, como ya ha pasado con la ley de amnistía.
Los barones del PSOE y el PP, en contra
Sin embargo, ya son diversas las federaciones autonómicas del PSOE que han exhibido su rechazo frontal a la financiación singular para Cataluña. Ante la puerta abierta que ha dejado el gobierno español, diferentes barones del PSOE han querido mostrar su rechazo a esta propuesta de financiación singular para Cataluña, insinuando que sería una cesión al independentismo catalán para mantener a Pedro Sánchez a la Moncloa. En este sentido, se ha pronunciado el líder socialista de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que ha cargado contra esta propuesta de financiación singular para Cataluña porque considera que sería «un precio demasiado caro para mantener un lugar».
Por otro lado, las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular han salido en todas a cargar contra el planteamiento del ejecutivo estatal y pidiendo una negociación multilateral en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. El primer barón autonómico del PP a pronunciarse fue el líder andaluz Juanma Moreno, que quiso dejar claro que tratará de «impedir» que se cometa una nueva «injusticia» con esta comunidad en materia de financiación autonómica, por «cesiones» del Gobierno central al independentismo catalán. En parecidas termas se refirió el presidente valenciano, Carlos Mazón, que ha calificado de «humillación para todos los españoles» este tratamiento especial para Cataluña.