La ONU se ha posicionado este viernes sobre el conflicto armado que se está viviendo desde hace meses a la franja de Gaza. El Tribunal Internacional de Justicia (TIJ) ha ordenado a Israel adoptar «todas las medidas posibles» para evitar un genocidio y permitir «inmediatamente» la ayuda humanitaria. Así lo ha anunciado la presidenta del organismo, la magistrada estadounidense Joan E. Donoghue, que ha precisado que el posicionamiento se ha adoptado 15 votos a favor y 2 votos en contra.
La corte con sede en La Haya ha concedido de este modo solo una parte de las medidas cautelares solicitadas por Suráfrica en su demanda contra Israel por genocidio, puesto que entre las medidas acordadas no hay la petición de alto al fuego. El tribunal descarta así ordenar al gobierno israelí la «suspensión inmediata» de las operaciones militares que inició por la agresión de Hamás del 7 de octubre.
Según informa la ACN, para poder otorgar las medidas cautelares en esta fase del procedimiento, el TIJ solo ha tenido en cuenta si es «plausible» que se estén produciendo vulneraciones de la Convención del Genocidio. Posteriormente, se entrará en el fondo de la cuestión, es decir, si efectivamente se ha violado este tratado de derechos humanos. En este sentido, el organismo cree que «al menos algunos actos y omisiones» del estado hebreo en la Franja de Gaza podrían ser genocidas y que hay un «riesgo que la situación humanitaria catastrófica» en Gaza «se deteriore» antes de que haya una sentencia firme en La Haya.
Posicionamiento vinculante sin medios
La decisión se ha adoptado con una amplia mayoría de la sala, puesto que solo han votado en contra la magistrada ugandesa Julia Sebutinde y el juez ad hoc israelí Aharon Barak. Hay que recordar que las decisiones del TIJ son legalmente vinculantes, pero la corte no tiene medios propios para hacer cumplir sus sentencias. Si un estado considera que se ha incumplido una sentencia, lo puede elevar al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para que adopte medidas.