La consejera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica y portavoz del Gobierno, Sílvia Paneque, ha negado que la reunión que este martes por la tarde mantendrán el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, y el presidente en el exilio y líder de Junts per Catalunya, Carles Puigdemont, en la Delegación del Gobierno ante la Unión Europea (Bruselas) sea fruto de «instrucciones» de Pedro Sánchez. «Descarto absolutamente cualquier tipo de instrucción o injerencia ni sugerencia de nadie. El presidente inició la ronda de encuentros con los expresidentes, dijo que lo haría en el momento oportuno, y ha considerado que este era el momento oportuno», ha manifestado durante la rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo de este martes después de que Turull, el secretario general de Junts, Jordi Turull, haya dicho en TV3 que Illa ha seguido las «instrucciones» de Sánchez.
Paneque ha defendido que el encuentro de esta tarde se enmarca en la ronda de reuniones que el presidente de la Generalitat inició hace un año con los expresidentes. De hecho, la consejera ha expresado que Illa encara el encuentro «de la misma manera y con el mismo ánimo con el cual se han hecho el resto de reuniones con expresidentes de la Generalitat«. «Normalidad institucional», ha remarcado, y ha añadido que la reunión con Puigdemont es, según ha dicho, «un paso más hacia la normalidad de Cataluña» y también debe servir para «hacer valer la ley de amnistía». «El compromiso de Illa de encontrarse con Puigdemont era firme, pero había que encontrar el momento adecuado», ha expuesto, remarcando que el encuentro se produce después de que el Tribunal Constitucional haya avalado la ley.
La consejera se ha mostrado sorprendida por las críticas de Junts que se produzca casi un año más tarde respecto al resto de expresidentes, porque el partido «había reclamado» el encuentro, y ha afirmado que se ha producido cuando Illa, y solo Illa, lo ha considerado necesario. «Ellos habían reclamado esta reunión y el momento lo ha elegido el presidente y el señor Puigdemont ha aceptado poder hacer esta reunión», ha dicho, y ha destacado que esta reunión «nos fortalece como país y es un paso más en la normalización de Cataluña». Con todo, ha manifestado que les hubiera gustado que se produjera en el Palau de la Generalitat, y ha insistido varias veces que el ejecutivo siempre se ha manifestado «a favor de la aplicación urgente y sin subterfugios de la ley de amnistía».

El Gobierno sitúa el encuentro en el marco de privacidad de Illa
Por otro lado, Sílvia Paneque ha reconocido que Carles Puigdemont tiene una condición diferente respecto al resto de expresidentes porque aún es un político en activo, pero no ha querido hablar sobre el contenido del encuentro porque lo enmarca en un «ámbito de privacidad» entre dos presidentes. «Cuando hay posiciones diferenciadas, el ámbito de privacidad permite hacer un intercambio y establecer marcos de confianza que puedan derivar en acuerdos en el futuro», ha señalado la portavoz del Gobierno, y ha reiterado que «este encuentro nos fortalece como país y el diálogo nos fortalece como democracia y es un elemento fundamental para poder avanzar como país».
Sobre si el encuentro puede ser un elemento que facilite la incorporación de Junts per Catalunya al Pacto Nacional por la Lengua y a otras iniciativas del ejecutivo, la consejera ha dejado claro que este no es el objetivo principal del encuentro. «Si esta reunión ayudara a acercar posiciones, perfecto. Esto ya lo hemos reivindicado, pedido e intentado desde antes de esta reunión». Finalmente, tampoco ha querido concretar si considera que Puigdemont se encuentra en el exilio para no entrar «en un debate de vocabulario», pero ha asegurado que Puigdemont vive una «situación no deseada» y que cree que debería poder recuperar la «normalidad personal y política» con su regreso a Cataluña.