El escándalo de las irregularidades en la gestión y las disfuncionalidades de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA) se han convertido en una piedra en el zapato de lo más molesta para Salvador Illa, que se ha visto salpicado por la opacidad de las gestiones pasadas en la DGAIA, con ERC en medio del ojo del huracán. La Consejería de Derechos Sociales anunció el pasado viernes que este lunes ofrecería una rueda de prensa para explicar cambios radicales en la dirección general y en una filtración a la Cadena Ser el Gobierno ha escenificado un cambio de guion para lavar la imagen y cambiar las cosas en una consejería que se puede convertir en el escándalo más grande de la última década en Cataluña. En el cambio de guion planificado por el Gobierno se contempla que la DGAIA pierda poder en la concesión de ayudas y contrataciones.
Illa baja el perfil para proteger a ERC y quiere depurar responsabilidades
El pasado miércoles 21 de mayo el presidente de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa, anunció durante la sesión de control en el Parlamento que el ejecutivo catalán quiere depurar responsabilidades en la gestión de la DGAIA durante los últimos años. «Llegaremos hasta el final caiga quien caiga, pete quien pete y salga lo que salga«, aseguró el líder del Gobierno catalán. Este cambio en el discurso, sumado al nuevo cambio de guion anunciado este lunes supone que el PSC deja ir la mano de ERC, uno de sus socios preferenciales, y lo deja solo ante los leones. Cabe destacar que la consejería de Derechos Sociales ha estado en manos de ERC durante casi los últimos 10 años en Cataluña con el único paréntesis del nombramiento de Violant Cervera entre mayo de 2021 y octubre de 2022. A pesar de este pequeño paréntesis, 3 de los últimos 4 consejeros de Derechos Sociales han sido miembros de Esquerra Republicana de Catalunya como fueron Dolors Bassa, Chakir El Homrani y Carles Campuzano.
El cambio de perfil del Gobierno implica que deja el perfil bajo y las decisiones discretas para proteger a ERC después de que los republicanos volvieran a hacer de muleta del gobierno socialista la semana pasada, cuando el Gobierno y el partido soberanista llegaron a un nuevo acuerdo para aprobar el tercer y último suplemento de crédito por un valor de 469 millones de euros. Una ampliación de crédito que no fue aprobada por los Comunes, el otro socio ‘preferencial’ de los socialistas.

El Gobierno, a toda prisa y a escenificar
La explosión del caso de abusos sexuales en la DGAIA y la opacidad en la gestión de la consejería ha hecho que Salvador Illa y su ejecutivo salgan, a toda prisa, a escenificar un cambio respecto a la gestión pasada de la consejería. Las irregularidades terminaron causando el encargo de una auditoría externa y el Gobierno recortará, o eso ha filtrado a la SER, el poder de la DGAIA que ya no podrá disfrutar de las competencias en concesión de ayudas y contrataciones. Además, se espera un refuerzo de la colaboración con el cuerpo de Mossos d’Esquadra y una revisión de los protocolos de actuación.