Faltan solo tres días para la sesión de constitución del Congreso de los Diputados y Junts, que también jugará un papel importante en la conformación de la Mesa, hace días que mantiene un perfil bajo, con contadísimas declaraciones públicas. Carles Puigdemont ha roto este silencio autoimpuesto del partido para asegurar que la receta de Junts para las negociaciones con el PSOE es la discreción y la paciencia. “Encarar una negociación a través de declaraciones públicas no es nuestra opción”, ha dicho el presidente catalán en el exilio en un mensaje publicado en Twitter.

Los socialistas necesitan presidir la Mesa del Congreso para poder controlar los tiempos de las posibles investiduras de Alberto Núñez Feijóo y Pedro Sánchez. De momento, el PSOE solo tiene garantizado el apoyo de Sumar y Bildu, que ya han anunciado que votarán a favor sin contrapartidas, pero también necesita a ERC, Junts, PNV y BNG para superar los 171 votos que tienen PP, Vox y UPN. El resto de sillas están casi repartidas de antemano y serán cuatro para el bloque progresista y cuatro más para el conservador, puesto que el sistema de elección así lo establece. Por lo tanto, la balanza la decantará la presidencia de la cámara, que sin los votos a favor del PSOE de todos los partidos independentistas y nacionalistas ahora mismo sería para el PP.

La vicepresidenta primera en funciones, Nadia Calviño, ha dicho en una entrevista en TVE que el presidente o presidenta del Congreso “tendría que ser una persona del PSOE” y ha defendido unas negociaciones “discretas” con el resto de grupos para asegurar una mayoría progresista. Calviño ha asegurado que hay “negociaciones constantes”. Por su parte, la portavoz de Sumar, Marta Lois, también ha apostado por limitar el “ruido innecesario” que rodea las negociaciones con ERC y Junts para no entorpecer las conversaciones.

La subasta de la investidura y un dardo a ERC

“Quizás por eso, a medida que se acercan días decisivos, como este próximo 17, crece el nerviosismo y sube la subasta. Y se disparan las especulaciones”, ha espetado Puigdemont. “Paciencia, perseverancia y perspectiva”. A pesar de que no lo menciona explícitamente, el mensaje del presidente catalán al exilio también es un dardo para la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que este fin de semana ha respondido a un artículo publicado en La Vanguardia en el cual se aseguraba que Junts ve inviable hacer un frente común con los republicanos.

“La posición de ERC es muy clara. Y será ERC quien hará de portavoz. Además, Junts y PSOE la saben”, avisó Rovira, que insistió una vez más en forjar una alianza con Junts. “Priorizamos el entendimiento estratégico con Junts. No queremos renunciar a la fuerza conjunta y necesaria de los 14 diputados independentistas”. Y también advirtió al PSOE que “no puede dar por sentados los votos de ERC a nada”, ni siquiera a la Mesa del Congreso. Los republicanos recuerdan que en la última legislatura, bajo la presidencia de la socialista Meritxell Batet, la Mesa ha prohibido hablar en catalán, ha vetado la investigación del Catalangate y ha encallado la tramitación de una ley de amnistía para los represaliados del Proceso.

Nuevo comentario

Comparte

Icona de pantalla completa