El presidente en el exilio y candidato de Junts+ a la presidencia de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha retomado este 1 de mayo su agenda de campaña después de la muerte de su madre, Nuria Casamajó, en un mitin a Argelers (Cataluña Norte) con la gente de Barcelona, donde ha invitado al presidente español, Pedro Sánchez, a empezar la regeneración democrática con ceses al PSOE y en el Consell de Ministros y ha señalado directamente a la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el ministro de Justicia, Fernando-Grande-Marlaska. «Él y su policía no son nada modélicos», ha subrayado, y ha pedido a Sánchez que pregunte al ministro si ha ordenado a la policía hacer un listado de «apellidos catalanes peligrosos». «Esto está pasando y no es broma. ¿Qué motivo hay que una persona que tenga Puigdemont de apellido y le digan que lleva un apellido peligroso?», ha pedido.
Aun así, Carles Puigdemont está convencido que no pasará en marcha ningún proceso de regeneración tendría que llevar a la fiscalía «algunos de sus diputados». «Algunos compañeros del partido del señor Isla que no tuvieron ningún miramiento de ir del bracito para embadurnar un partido político para embadurnar sus dirigentes. ¿Le suena el nombre Camarga? ¿Le suena Tácito, señor Sánchez? Mire bien cerca que tiene algún compañero sentado en el Congreso que le podría explicar algunas cosas. ¡Empiece por hacer limpieza en su casa y después lo creeremos!», ha sentenciado, y ha subrayado que él hace seis años y medio que vive en Bélgica y sabe qué es la justicia independiente: «la diferencia es abismal y esto Pedro Sánchez no cambiará». Así mismo, ha ironizado este miércoles como que el PSOE, que habían liderado Felipe González y Alfonso Guerra, quiera ahora la regeneración democrática en España: «¡Manso a la cartera!». «Y no hace falta ir tan lejos: Illa todavía cree que nos aplicaron el 155 demasiado tarde», ha añadido.
«El problema no es el estado de derecho, son las encuestas», ha subrayado el candidato de Junts, que ha remarcado que Sánchez necesita una mayoría cualificada en el Congreso para hacer una «regeneración profunda» en el estado español y pone en duda que el PP quiera participar en este proceso. Así, ha acusado el líder de los socialistas españoles de haber «orquestado una farsa» con el único objetivo de «arrastrar votos» para impedir que Cataluña tenga un gobierno que «vaya a todas». «Nosotros fuimos los únicos que no nos creímos esta farsa, y ahora todos pliegan. No nos refiamos. Por eso negociamos con ellos con un mediador internacional. ¡Basta!, ha sentenciado ante un público de la capital catalana que ha abarrotado el Espacio Jean Carrére.

La independencia, la «mejor» regeneración democrática
Carles Puigdemont ha advertido los catalanes que en estos comicios solo hay dos opciones posibles que pueden gobernar Cataluña. Por un lado, ha señalado la opción que «puede hacer presidente Isla, una alianza de izquierdas o haciendo un Collboni» y, por otro lado, la suya, la que «defiende Cataluña sin pedir permiso a Madrid». «O avanzamos como país o como nación, o reculamos como región, no hay más. La elige es esta: o nos hundimos como nación o levantamos el jefe y avanzamos como país independiente”, ha afirmado Puigdemont, que ha dicho que ellos tienen la fórmula de la mejor regeneración democrática y pasar página de España: la independencia».
«Hacer un Collboni»
La ciudad de Barcelona ha sido uno de los grandes protagonistas del mitin de este miércoles, puesto que ha contado con la presencia de la ex alcalde de Barcelona y líder del grupo municipal de Junts en el Ayuntamiento de la capital catalana, Xavier Trias, y del regidor y número 7 de la lista de Junts+ por Barcelona, Josep Rius, junto con otros candidatos de la lista por la demarcación de Barcelona. Ambos dirigentes han acusado el PSC de querer repetir la operación que permitió a Jaume Collboni ser alcalde de la capital catalana. Es decir, «hacer un Collboni» en el Parlamento después de las elecciones del próximo 12 de mayo. «Si no frenamos el paso a Sánchez, Illa y Collboni volverán a hacer un pacto españolista y convertirán Cataluña con una sucursal de Madrid», ha destacado Rius.