Juan Carlos de Borbón quiere ser aceptado por el resto de la familia otra vez, aunque sea exclusivamente en las reuniones privadas. Sus amigos están hartos de repetir que el emérito quiere volver a España, un deseo que Felipe VI no quiere cumplir de ninguna de las maneras. En la Casa Real le va muy bien que continúe residiendo en Abu Dabi, lejos de los focos y los posibles titulares escandalosos que pueda protagonizar. Esto no impide, sin embargo, que él insista e insista… hasta el punto de hacerse pesado.
Últimamente, eso sí, parece que el clima de tensión entre padre e hijo se ha reducido. Juan Carlos está viviendo Galicia con mucha frecuencia y esto se explica porque se lo están permitiendo, se supone. La excusa son las regatas, unas jornadas a alta mar que pide como favor personal porque es una de sus grandes pasiones y no quiere desatarse.
Y ahora que la relación está mejorando poco a poco, el emérito quiere aprovecharlo. ¿Su deseo? Poder tener un papel -por pequeño que sea- en algún acto institucional.
¿Cómo le justificaron estas tres negativas seguidas? Con el mismo argumento, si hacemos caso al medio especializado: «Desde la Zarzuela obtuvo un

¿Por qué quiere volver a España Juan Carlos de Borbón?
Juan Carlos no pierde la esperanza y continúa pidiendo y pidiendo. Prueba de esto es que ahora ha vuelto a hacer una petición a su hijo, poder acudir al puerto de Cádiz para despedir a su nieta antes de que se embarque en el barco escuela Juan Sebastián Elcano el próximo mes de enero. Se estará seis meses navegante por diferentes rincones del mundo, una experiencia en la marina que haría mucha ilusión a su abuelo porque él siempre ha sido uno apasionado del mar.
«El emérito no pierde la ilusión que en algún momento pueda suceder este encuentro en público con la princesa«, dice. Del mismo modo, todavía mantiene la esperanza de poder volver a España: «No hay lugar para un plan de vuelta a corto plazo, pero Juan Carlos tiene intenciones de hablar con su hijo para poder hacerlo», filtran algunas fuentes próximas a él.