Naciones Unidas ha denunciado que el Ministerio de Defensa y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han dado 24 horas a todos los palestinos que viven en el norte de la Franja de Gaza para abandonar su casa y marcharse hacia el sur. El portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, ha explicado que el gobierno israelí ha enviado el ultimátum “justo antes de la medianoche”, hora local. La amenaza de Israel afecta a “1,1 millones de palestinos e incluye a todo el personal de las Naciones Unidas y a todas las personas refugiadas en instalaciones de la ONU, también escuelas, centros de salud y clínicas”.
Con esta maniobra, Israel redobla la presión sobre Hamás, que mantiene retenidos a unos 150 israelíes en la Franja de Gaza, pero también sobre la población civil y la comunidad internacional. Este miércoles, el ministro de Energía, Israel Katz, ya advirtió que el bloqueo total de Gaza se mantendría hasta que el grupo islamista libere a todos los rehenes. La ONU y la Unión Europea han criticado abiertamente la estrategia de ahogo del gobierno israelí, pero en Tel Aviv están dispuestos a todo para vengar el ataque que sufrieron el pasado fin de semana y que ha dejado al menos 1.300 israelíes muertos.

La ONU avisa que un desplazamiento de personas de esta magnitud es “imposible que no tenga consecuencias humanitarias devastadoras” y ha reclamado a Israel que dé marcha atrás y cancele la orden.
Israel prepara el terreno para la invasión terrestre
“¿Ayuda humanitaria en Gaza? No se encenderá ningún interruptor eléctrico, no se abrirá ninguna salida de agua y no entrará ningún camión de combustible hasta que los secuestrados israelíes vuelvan a casa”, advirtió Katz. El ejército israelí prepara una ofensiva terrestre sin precedentes y parece que el primero y principal objetivo es la ciudad de Gaza, bastión de Hamás situado en el norte de la Franja. Después de anunciar el ultimátum, los militares han enviado un comunicado pidiendo a “todos los residentes” de la ciudad que abandonen su casa y se marchen hacia el sur “por su seguridad”.
Las FDI aseguran que Hamás tiene una red de refugios y de túneles por toda la ciudad de Gaza, “bajo las casas y a debajo de muchos edificios”. Mientras tanto, la crisis humanitaria que sufre la Franja de Gaza no deja de agraviarse. La campaña de bombardeos iniciada por Israel después de los ataques del fin de semana ha matado ya más de 1.500 palestinos, de los cuales unos 500 son niños, según el Ministerio de Salud de Gaza. El número de desplazados internos sube ya a 423.000 personas, según cifras de la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
Solo esta noche, la Fuerza Aérea israelí ha bombardeado 750 “objetivos militares” en la Franja de Gaza, en especial túneles subterráneos, complejos militares, residencias de altos cargos de Hamás, depósitos de armas y salas de comunicaciones.