El presidente ruso, Vladímir Putin, en plena guerra con Ucrania, vuelve a elevar la tensión en Occidente ante la apuesta de la Unión Europea (UE) y la OTAN de expandir la industria armamentística. Como ya ha hecho en alguna otra ocasión ante los movimientos de Bruselas, Putin ha vuelto a amenazar con una guerra nuclear: «El que están inventando constituye una amenaza real de conflicto con el uso de armas nucleares, que supondría la destrucción de la civilización», ha asegurado desde el Kremlin en su discurso sobre el estado de la nación, que se ha pronunciado este jueves por la mañana. Con un tono firme, y en respuesta en las declaraciones del presidente francés, Emmanuel Macron, en las cuales se mostraba dispuesto a enviar tropas occidentales a Kiev, Putin ha querido dejar muy claro que cualquier intento de ataque en Rusia tendrá «consecuencias peores que la Segunda Guerra Mundial».
Durante el discurso, el presidente ruso ha vuelto a amenazar con arsenal nuclear y con posibles ataques en territorio europeo y norteamericano ante cualquier movimiento que vaya en contra de Moscú, como por ejemplo, desde su punto de vista, enviar tropas en Ucrania: «Tendrían que darse cuenta de que nosotros también tenemos armas que pueden atacar su territorio; todo el que se le acude en Occidente crea la amenaza real de un conflicto con el uso de armas nucleares y, por lo tanto, la destrucción de la civilización», ha espetado. En este mismo discurso, Putin también se ha querido referir al conflicto armado que ya hace tres años que golpea Kiev. El presidente ruso mantiene que se trata de una «operación militar especial» que tiene como objetivo «erradicar el nazismo» en el país.

Nuevos despliegues militares
Mientras Putin amenaza con «consecuencias trágicas» ante la propuesta europea de enviar tropas a Kiev para hacer frente a la invasión rusa, desde el Kremlin han puesto en marcha este mismo jueves un nuevo despliegue militar. El objetivo es reforzar el flanco occidental ante los movimientos de la OTAN: «¿Es que no lo entienden? Son personas que no han pasado por pruebas difíciles. Ya han olvidado lo que es la guerra», ha concluido el mandatario ruso.