“Están muy nerviosos”. Esta es la principal reacción de los sindicatos ferroviarios minoritarios en respuesta a las palabras del director de Rodalies, Antonio Carmona —quien ha perdido galones dentro de la empresa en los últimos días—, en las que ha detallado que están investigando a dos trabajadores de la compañía por un posible sabotaje al servicio durante la jornada de huelga de este martes, la última prevista por las organizaciones sindicales: “Son actos que no toleraremos y no representan a los trabajadores de Renfe en Cataluña”, apuntó Carmona en una entrevista en Catalunya Ràdio.
De hecho, Renfe ya ha apartado a dos trabajadores por el presunto sabotaje al servicio ferroviario que habría provocado la cancelación de trenes de la R1 y la R3, y puntualmente la R4. Desde los sindicatos minoritarios del sector, sin embargo, desmienten categóricamente las afirmaciones del director de Rodalies: “Ayer no hubo ninguna acción sindical en L’Hospitalet [tal como apuntó Antoni Carmona], sólo la huelga convocada legalmente”, sostiene Joan Rodríguez, delegado del Sindicato Ferroviario (SF), en conversación con El Món.

Desde la organización sindical consideran que la respuesta “nerviosa” de la “dirección de Renfe y Adif”, evidenciada por las palabras de Carmona, se debe a la “incidencia de la huelga” de los sindicatos minoritarios: “No se la esperaban”, apunta Rodríguez, que asegura que en las protestas de las últimas semanas también han participado trabajadores afiliados a los sindicatos mayoritarios del sector —Semaf, UGT, CCOO, SCF— que están en desacuerdo con el pacto alcanzado con Renfe y la Moncloa para desconvocar la huelga prevista —de la cual sólo se han mantenido las organizaciones minoritarias.
En esta línea, el delegado del comité de empresa en Barcelona de SFF-CGT, Pedro San José, apunta que desde las operadoras ferroviarias “pensaban que sólo harían huelga los trabajadores de la CGT, pero hay trabajadores de los sindicatos mayoritarios que también se han sumado”, argumenta. A pesar de los argumentos de los sindicatos, desde Renfe cifran en un 8,4% el seguimiento de la huelga de las organizaciones minoritarias del sector este martes.
Responsabilizar “la plantilla”
Desde las organizaciones sindicales minoritarias consultadas también argumentan que las palabras del director de Rodalies, con las cuales apunta a un posible sabotaje por parte de trabajadores de Renfe, también se deben a la “improvisación” de la empresa ferroviaria: “Como la empresa improvisa, envían dos maquinistas al mismo tren: uno para los servicios mínimos [tal como decreta la ley durante las huelgas] y otro por si acaso, vulnerando el derecho a huelga. Y claro, en otros trenes no va ninguno”, asevera el delegado sindical de la CGT, que asegura que desde la operadora ferroviaria atribuyen el caos vivido este martes a un sabotaje para “escurrir la culpa”: “Es lo de siempre”, añade. En esta línea, desde el Sindicato Ferroviario también lamentan que la operadora ferroviaria ponga al frente de toda la crisis de Rodalies a “la plantilla”, ya que ellos también sufren la desinversión y el mal estado de las líneas: “Lo sufre la ciudadanía, pero también los trabajadores”, remacha Joan Rodríguez.
Este martes, el día de la polémica —en el cual también se tuvo que desalojar la estación de Passeig de Gràcia, entre otras—, se produjo la última jornada de huelga prevista por los sindicatos minoritarios. Sin embargo, desde las organizaciones de trabajadores aseguran que la batalla por las mejoras laborales del sector, y las mejoras del servicio ferroviario en general, aún no ha terminado. De hecho, parece que está lejos de acabar. Desde la CGT han convocado una protesta este jueves a las 12 del mediodía a las puertas del Ministerio de Transportes, dirigido por Óscar Puente, en Madrid. Y, en esta línea, los sindicatos también trabajan en una macroprotesta convocada para el 26 de abril en la capital española. Según detallan, de momento no han convocado nuevas jornadas de huelga. Sin embargo, tampoco descartan que se puedan producir: “No nos cerramos ninguna puerta”, apuntan.