Después de un mes de incertidumbre, el Departamento de Educación, encabezado por la consejera en funciones, Anna Simó, ha culminado el proceso de adjudicación de plazas para el curso próximo. Un proceso marcado por los «problemas técnicos», el aumento sustancial del número de funcionarios que empiezan a formar parte del sistema educativo catalán -después del proceso de estabilización masivo para cumplir con las ratios del 8% de interinato marcadas por la Unión Europea y el proceso ordinario de este año-, y el malestar de la comunidad educativa. Este viernes, pero, la consejería ha publicado el listado definitivo de plazas para el curso próximo, y, según los datos facilitados, el 97% de los aspirantes han conseguido plaza en una de sus tres primeras comarcas -distrito, en el caso de Barcelona- solicitadas.
Desde la consejería defienden la gestión que han llevado a cabo con las adjudicaciones de verano de este año, porque, todo y las fuertes críticas de la comunidad educativa, que incluso llevaron a los sindicatos de docentes a convocar una concentración a las puertas de la sede de departamento en la vía Laietana, han estado «especialmente complejas de gestionar» a causa del «gran incremento de nuevos funcionarios». Concretamente, el 1 de septiembre, un total de 31.153 empezarán a formar parte del sistema educativo catalán como funcionarios gracias al proceso de estabilización de plaza a través de concurso de méritos, el concurso oposición extraordinario y el concurso oposición ordinario. De hecho, curiosamente, el 2022, tres de cada cuatro adjudicaciones fueron de interinos; en cambio, el 2024, tres de cada cuatro han estado de funcionarios.

Las carencias del decreto de plantillas
A pesar de que el volumen de plazas a cubrir era el mismo que en otros años -a pesar de que ahora las plazas se tenían que llenar con otra tipología de personal, es decir, en lugar de interino, funcionario-, este año se ha abierto un nuevo conflicto que ha hecho tambalear el decreto de plantillas. Un decreto que permite a las direcciones de centro «perfilar» algunas plazas en función de sus necesidades, cosa que de entrada tenía que servir para garantizar la continuidad de las plantillas, pero que algunas direcciones han utilizado para crear plazas a medida.