El titular del juzgado de instrucción 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, ha decidido archivar la instrucción abierta en la macrocausa Volhov a David Madí, ex mano derecha del presidente Artur Mas. La interlocutoria, avance por
En concreto, el juez ha hecho caso del que hacía tiempo que advertía el fiscal del caso, Fernando Maldonado –ahora destinado en València–, que en varios escritos cargaba contra una instrucción que a menudo calificaba de prospectiva. Así, Aguirre valla y archiva dos investigaciones por tráfico de influencias para conseguir licencias de VTC y en beneficio de la compañía Aigües de Cataluña para adquirir Aigües de Barcelona. Dos negociaciones que el mismo magistrado admite que acabaron de la «peor manera posible». El archivo abre posibilidades legales a Madí para buscar explicaciones en cuatro años de investigaciones sin ningún resultado. El juez es concluyente al afirmar que no se da ninguno de los tipos penales por los cuales se lo investigaba.

Ni negocios, ni Rusia
En la interlocutoria, Aguirre precisa que el nivel de influencia de Madí en los cargos institucionales que visitaba era más bien escaso. Incluso, aduciendo los atestados de los seguimientos de la Guardia Civil, manifiesta que las reuniones con la administración eran poca cosa más que cortesía «protocolaria». Es más, apunta que las relaciones comerciales delegadas de las empresas que representaba se partieron, un hecho que demostraría el nulo resultado de sus actividades.
Por otro lado, y con relación a la trama rusa, lo juzgue mujer por buena la tesis de Madí respecto de su declaración. En este sentido, recuerda que nunca dio credibilidad a los proyectos o afirmaciones de Víctor Tarradellas, el exsecretario de relaciones internacionales de CDC, sobre un hipotético apoyo ruso a la independencia de Cataluña. Tarradellas continúa investigado por el juez por la causa madre del Volhov, el caso Estela, es decir, por las subvenciones que recibía la fundación Catmon que presidía este activista soberanista. Madí fue detenido el octubre del 2020 en una ràtzia de arrestos dirigidos por la Guardia Civil donde también fueron esposados la exdirigent de ERC Xavier Vendrell y el empresario cultural Oriol Soler, entre otros. De hecho, los dos continúan investigados en otras piezas separadas.