Poble Lliure, la organización vinculada a las filas cupaires, ha cargado con fuerza contra la dirección de la CUP y les exigen «responsabilidades» a raíz de los males resultados de estos pases elecciones del 12 de mayo, puesto que han perdido buena parte de su peso dentro del Parlamento y se han quedado con solo 4 diputados. Desde Pueblo Libre consideran que la bajada no responde a «el trabajo hecho» durante la campaña del 12-M, sino a «una trayectoria» de los últimos años, la cual tildan de «errática» y «autodestructiva»: «Los malos resultados lo son por la trayectoria de la CUP, más de una vez errática o autodestructiva durante los últimos años, sobre todo por la carencia de implicación real de una parte muy significativa de la organización en el movimiento popular por la independencia», apuntan a través de un comunicado.
Para la organización, hace falta que los dirigentes de la formación anticapitalista asuman «sus responsabilidades» y que marquen un camino para trabajar para «construir una candidatura amplia con voluntad de ganar y gobernar»: «La bajada de votantes de la CUP, mayoritariamente en clave independentista, evidencia que hay que reforzar un discurso nacional-popular completamente desacomplejado para hacer entender que aquello que es bueno para los intereses de los trabajadores catalanes también lo es para el país», apuntan desde Poble Lliure. En este sentido, la organización vinculada a las filas cupaires también se ha querido referir al conjunto del independentismo político, puesto que considera que hay que hacer una «renovación de liderazgos», puesto que los actuales «se han demostrado agotados» -como se ha visto también con la caída de ERC que ha propiciado una serie de movimientos al frente del partido. «Hay que afrontar el nuevo ciclo con una nueva estrategia realista y capaz de interpelar el conjunto del pueblo catalán».
Un escenario «gris» al hemiciclo
Desde Pueblo Libre han lamentado que los resultados del pasado domingo «dibujan un escenario gris e incierto», el cual consideran que es, «en buena parte, consecuencia esperable de la apuesta de ERC por la pacificación del conflicto, la gestión de la autonomía y un socioliberalismo inútil». Además de lamentar la pérdida de la mayoría independentista y la victoria del PSC «más liberal y españolista de las últimas dos décadas», desde Poble Lliure también han querido poner el foco en la irrupción de Alianza Catalana en el Parlamento: «Una extrema derecha que ha sido alimentada por medios de comunicación españolistas, pero también por opciones de izquierdas, que, queriéndola usar de espantajo, lo han puesto en el centro del debate».
