Telecinco tendrá un problema grave con la nueva edición de Gran Hermano VIP. Ya son unos cuantos los famosos que han declinado la oferta del programa para ir a concursar a la nueva edición, que se estrenará bien pronto. Todavía no tienen la lista definida y esto puede imposibilitar que realmente pueda salir el próximo mes como querían.
El reality ha tenido muy mala prensa desde que una ex concursante, Carlota Prado, denunciara a un compañero y a la dirección en bloque por no impedir que el chico abusara de ella adentro de la casa. Muchísimos anunciantes retiraron la publicidad y el programa no ha vuelto a emitirse desde entonces. Han pasado unos cuantos años y han pagado la multa correspondiente, pero todavía son muchos los personajes conocidos que no quieren estar relacionados con este controvertido programa.
Se había publicado que Laura Escanes podría ser el fichaje estrella de esta edición, una noticia que supondría una auténtica bomba porque la influencer y ex de Risto Mejide nunca ha participado en un formato similar. Rápidamente, muchos de sus seguidores han empezado a preguntarle sobre el tema y ella ha querido dejar claro que ni siquiera se lo ha planteado: «No, gracias«.
Laura Escanes niega haber fichado por Gran Hermano VIP | Instagram
Gran Hermano VIP está teniendo problemas para encontrar concursantes
Marta Flich será la presentadora de esta nueva versión del programa, con la que Mediaset confía en poder recuperar alos fans antiguos que los abandonaron después del escándalo. En la presentación, dijeron que el casting que buscaban no tendría nada a ver con el que habían tenido otros años: «El casting de esteGH VIP renovado no será un casting al uso, en cuanto que los telespectadores reconocerán los famosos por su trayectoria profesional. Queremos buscar deportistas de élite, por ejemplo».
Marta Flich, contenta por el fichaje en Gran Hermano VIP| Instagram
No les está siendo fácil cumplir con este objetivo, por lo que se habrían abierto a recuperar los personajes que acostumbraban a ir a programas como este. El problema es que muchos influencers les están diciendo que no, una negativa que no se esperaban y que puede forzarlos a tener que pagar más dinero o, en el peor de los casos, a posponer su estreno.