Supervivientes se ha convertido en el reality de aventuras más extremo de la televisión. Año tras año, los famosos se enfrentan a temporales meteorológicos, hambre, sueño, pruebas físicas y la convivencia con compañeros y compañeras que pueden mostrar su cara más oscura para superar todos los retos. Desde su llegada a Honduras, los participantes se ven obligados a buscar sus instintos de supervivencia para conseguir cosas tan básicas como hacer fuego y buscar alimentos. En el momento de trasladarse a los Cayos Cochinos, cambian las maletas por unos sacos hechos de arpillera, donde pueden guardar pocas cosas.
Durante los programas, los famosos van cambiando de bañadores, y llevan más de una prenda de ropa, ante los cambios meteorológicos constantes que les afectan. La revista Lecturas reveló qué objetos pueden usar y qué les permite la organización. ¿En qué consiste su kit de supervivencia?
¿Qué llevan dentro del saco?
Una de las preguntas que pueden hacerse los seguidores del programa de Telecinco es qué hay en esos sacos que los participantes arrastran cada vez que cambian de playa. A medida que superan pruebas, pueden pasar de Playa Furia a Playa Calma, o viceversa, y dentro de esos sacos llevan los utensilios más imprescindibles. Según explica el citado medio, cada concursante lleva cinco bikinis o bañadores, dos mudas de ropa interior, un pantalón largo para dormir, un pantalón corto, tres camisetas de manga corta, una de manga larga, tres pares de calcetines largos y tres normales.

Por otro lado, la organización de Supervivientes también les facilita una serie de utensilios adecuados para los tres meses que pueden estar en Honduras. ¿Y cuál es este material? Un par de zapatillas, botas de campo y escarpines, para poder pescar en las zonas de roca. En cuanto a la ropa, y que ya se ha demostrado durante el concurso que es muy necesaria cuando llegan los temporales, tienen una sudadera, un forro polar, un pantalón impermeable y un impermeable completo.
Utensilios de higiene y un objeto personal
La aventura televisiva es extrema y obliga a los concursantes a intentar sobrevivir ante la intemperie máxima. Aun así, desde la organización mantienen unos niveles de higiene básicos para que los concursantes puedan lavarse los dientes, además de tener utensilios para afeitarse y productos colectivos como crema solar, repelente de mosquitos, champú… También varía la cantidad de comida a la que pueden acceder entre una playa y otra. Playa Calma, la zona que supuestamente tiene las mejores condiciones, hay 30 gramos de arroz integral al día por persona y 20 gramos de lentejas, además de seis latas de otros alimentos para repartir entre todos, una olla para cocinar, una navaja multiusos y un kit de pesca. En Playa Furia, sin embargo, la situación se complica, porque solo tienen 40 gramos de arroz por persona y día, cuatro latas y una olla pequeña para cocinar. De ahí que se arriesguen al máximo para superar los juegos y poder cambiar de playa.

Los objetos personales de los concursantes
En cada edición, los supervivientes pueden elegir un objeto personal que los acompañe durante la experiencia. Algún recuerdo que les ayude a mantener la confianza durante las semanas tan duras del concurso. Por ejemplo, Almácor lleva una almohada con fotografías de su novia -que recientemente le ha visitado por sorpresa en Honduras y él le ha pedido matrimonio-, Anita guarda un peluche en forma de mono para recordar a su hijo y Montoya un peluche de su perrita. Estos objetos también forman parte de la dinámica del concurso, porque en algunas pruebas, tienen la oportunidad de intercambiar el objeto más íntimo que tienen por una recompensa, como puede ser un plato de comida. De hecho, el mismo Montoya ha dado su peluche a cambio de una pizza entera para él solo. Sea como sea, este kit de emergencia es un pequeño apoyo ante la dureza de este concurso televisivo.