Estela Grande espera la llegada al mundo por partida doble de sus dos hijos. La exconcursante de Gran Hermano y expareja de Diego Matamoros se convertirá en madre por primera vez muy pronto junto a su novio, el futbolista profesional Juan Iglesias. La espera, sin embargo, no es tan dulce como les gustaría después de su ingreso en el hospital. La pareja fue al centro médico para realizar las pruebas pertinentes en este tercer trimestre de embarazo, y fue entonces cuando los médicos se dieron cuenta de que algo no iba del todo bien. La influencer sorprendió a todos publicando una fotografía desde el hospital, haciendo saltar las alarmas de sus seguidores. A pesar de admitir que no era la Navidad «que habían planeado», lo más importante eran sus criaturas, los pequeños Luca y Liah. «Cada día que pase y que continúen dentro mío es una victoria. Mis bebés campeones, tengo muchas ganas de estar con vosotros, pero aún no, por favor, sois demasiado pequeños». Ahora, sin embargo, la joven ha actualizado su estado de salud a la espera de la llegada de los recién nacidos.
¿Cómo se encuentra Estela Grande? Foto desde el hospital
La creadora de contenido continúa ingresada en el hospital, tal como ha compartido con sus seguidores, a través de una fotografía en la que se la ve en la cama del hospital y con la panza embarazada monitorizada. «Agotada, pero confiando», ha escrito en esta foto. «Un día más. Hoy ha terminado el segundo ciclo de medicación, ojalá que no vuelvan las contracciones. Gracias a todos, que sepáis que os estoy leyendo y me llenáis de ánimos», ha agradecido.

¿Pero cuál es el problema que han detectado los médicos? Estos días que han pasado en el hospital, cuando las familias estaban disfrutando de las fiestas de Navidad, la pareja ha estado muy pendiente del estado de salud de los pequeños para que no llegaran al mundo antes de tiempo. Fue el pasado día 23 de diciembre cuando visitó el hospital para una revisión periódica de los bebés. «Después de una ecografía vieron que se me había acortado mucho el cuello del útero de manera muy rápida y que tenía contracciones. Estaba en riesgo de parto prematuro», explica la joven en un carrusel de fotografías de los últimos días.
¿Por qué la han ingresado en el hospital?
Su ginecóloga los envió a urgencias para controlar las contracciones, y allí decidieron que la mejor opción para controlarlas y para «madurar los pulmones de los bebés» era que la ingresaran. «Después de cuatro días con la medicación para frenar el parto, si la retiran, las contracciones vuelven, por lo que hay que repetir el ciclo», explica.
En todo caso, cada día que puedan mantenerlos en la panza ya es «una victoria para ellos», de manera que puedan reducir el riesgo de parto prematuro. «En ningún momento mi embarazo ha sido catalogado de riesgo, aun así he tenido revisiones mucho más frecuentes que en un embarazo único». Además, ha dedicado unas palabras a las personas que han puesto como posible culpable de esta situación los entrenamientos que ha estado haciendo la chica durante el embarazo. «Mis entrenamientos no han tenido nada que ver con esta situación, por mucho que algunas de vosotras queráis intentar hacerme sentir mal. Intentar hacer sentir mal a alguien de esta manera, diciendo que esto lo he provocado yo, no tiene nombre. No tenéis escrúpulos y no os merecéis la más mínima explicación», ha cargado duramente. En todo caso, ahora Estela Grande necesita tranquilidad y centrarse en el descanso antes de la llegada de los pequeños, que llenarán su familia con el futbolista.

