Bad Gyal protagoniza esta semana su primera portada de
La hija del actor Eduard Farelo se encuentra en un momento «muy feliz» y «de renacimiento». Ahora bien, no todo es de color rosa. Ella, con toda la fuerza y seguridad que demuestra, reconoce ahora que también tiene momentos de debilidad. Este verano, por ejemplo, confiesa que no se sentía bien consigo misma. Lo disimula, pero también se come la cabeza: «Hubo un momento en el que me engordé, me deshidraté por culpa del sudor de las giras y me hinché. Aquello me provocó mucha inseguridad, no me sentía. Ahora me veo increíble y más guapa que nunca. Al final he aprendido que todo viene de dentro. Me siento querida, tengo paz y tranquilidad«.

Bad Gyal reconoce que siente mucha presión estética en el mundo de la música
En el mundo de la farándula hay mucha presión y todos analizan la imagen que proyectan las artistas: «Le doy mucha importancia al físico. Me mato en el gimnasio, intento comer lo mejor posible para sentirme y verme bien. Soy un personaje público y una chica, hay presión estética y yo también me la pongo a mí misma. Siempre he sido muy presumida y ahora soy conocida, lo que supone un cóctel explosivo».
Muchos ven a Bad Gyal como una chica prepotente. Pero ¿cómo se define ella misma? «Yo soy
Algunos le han criticado a ella y a otros cantantes por mostrar coreografías y letras muy explícitas. Ahora bien, estos comentarios no le afectan en absoluto. De hecho, desea que cambie esta mentalidad cuanto antes mejor: «Siempre me ha inspirado una música muy gráfica y yo soy muy sexual en todos los aspectos. Es normal que lo refleje cuando me pongo ante el micrófono. Quiero tener la libertad de bailar como quiera bailar y de expresarme como me quiera expresar. Por mí, este es el lenguaje de mi amor propio». Una Bad Gyal transparente que ha hecho las delicias de sus fans al abrirse algo más de lo que acostumbra a hacer.