Iñaki Urdangarin ha aceptado, finalmente, las condiciones que le impone Cristina de Borbón en las negociaciones del divorcio. Les ha costado más de un año ponerse de acuerdo, pero todo está preparado para que firmen los papeles que romperán su matrimonio por siempre jamás. Así lo ha asegurado Elena de Borbón, su hermana, que ha dado información sobre el tema en una conversación privada que se ha filtrado a la prensa.
La infanta española estaba hablando con una persona en privado, a quien «entre cuchicheos» le habría confirmado que el acuerdo de separación se cerrará «en cuestión de semanas y, seguro que antes de finales de año«, dicen a

Iñaki Urdangarin da un giro de 180° a su carrera profesional
Y ahora que se ha sacado este peso de encima, ¿qué hay de la vida actual de Iñaki Urdangarin? Se había dicho que su antiguo suegro le había encontrado un trabajo increíble en una empresa del Ibex35. Pues bien, parece que eso era solo un rumor. Ahora, la revista
Ainhoa Armentia e Iñaki deben de estar de lo más enamorados si realmente también quieren coincidir al trabajo. El medio los ha captado en una fotografía juntos y ha podido confirmar que los dos están trabajando en la misma empresa desde hace unas semanas. Queda claro que no hacen caso de aquello que siempre se dice que es complicado trabajar con la pareja… Han decidido mezclar vida personal y profesional, a pesar de los problemas que esto pueda causarles.
Hay que recordar que Iñaki y Ainhoa ya trabajaron juntos en el pasado. El exmarido de la infanta Cristina se habría dejado cautivar por la administrativa, quien también estaba casada todavía cuando empezaron a intimar. Él dejó el trabajo al bufete de abogados en el que trabajaban cuando salió a la luz su infidelidad con la compañera, pero ahora vuelven a trabajar en el mismo despacho porque ella también habría dejado el bufete donde estaba.

Ainhoa Armentia ficha por la misma constructora que ha dado trabajo al ex de Cristina de Borbón
Ahora mismo estarían trabajando en una constructora local y modesta en las afueras de Vitoria. Aquí no tendrían un sueldo muy alto, pero sí que disfrutarían de una vida mucho más tranquila: «No tendrá un sueldo de 300.000 € en una empresa del Ibex, sino un lugar mucho más modesto. Este es un lugar en el que no se siente juzgado y, además, tiene la suerte de poder trabajar con alguien en quien confía plenamente», dicen refiriéndose a su pareja actual.
Iñaki Urdangarin quiere una vida más terrenal, por lo que indica este cambio de vida. Con Ainhoa a casa y también al trabajo, ahora tendrán que demostrar que el amor puede con todo.