Elena y Cristina de Borbón han pasado un verano lleno de viajes y salidas familiares, como los encuentros de la exesposa de Iñaki Urdangarin con su padre Juan Carlos I en Sanxenxo. A pesar de la aparente felicidad, hace meses que en la Zarzuela se ha instalado la preocupación por la salud de Irene de Grecia. La hermana de Sofía de Grecia atraviesa una situación bastante delicada y tanto su hermana como sus sobrinas han pasado a ocuparse de los cuidados y de estar pendientes de su tía.
Cristina y Elena de Borbón se turnan para acompañar a su tía Irene
Son días complicados para la familia real española, que se une para cuidar a la tía Irene. Según recoge la revista Lecturas a través de la publicación de Pilar Eyre en su blog, las hermanas de Felipe VI se organizan para ayudarla con la enfermedad neurodegenerativa que padece. «Sofía está realizando una vigilia dolorosa junto a su hermana enferma. Sus hijas no la han dejado sola ni un momento y son las que organizan el operativo médico de su tía Irene», explica la periodista en la citada revista.
Según indica, el papel de las dos hermanas es de forma «completamente desinteresada» ante una situación familiar muy dolorosa para Sofía de Grecia. La Zarzuela se ha llenado de «servicios, médicos, enfermeras y sacerdotes católicos y ortodoxos que visitan a la reina para ofrecerle consuelo», dice la periodista experta en casas reales.
Sofía de Grecia, muy afectada por la situación de su hermana
Más allá del trabajo de Elena y Cristina de Borbón, parece que la madre de Felipe VI lo está pasando realmente mal con la situación de su hermana. «Ven en el rostro de su madre la tristeza, y procuran que esta no le pase factura -aunque lo haga- y que se mantenga animada y ocupada«, explican desde la revista. «Sin su bastón de apoyo y con la familia rota, Sofía se queda sin el timón de su barco». Sea como sea, todas las miradas continúan pendientes de cómo avanza la situación.
