El Papa Francisco I ha vuelto a ceder la lectura de un discurso a uno de sus colaboradores después de un ataque de tos. El pontífice, de 87 años, ha pedido a monseñor Filippo Ciampanelli que continúe la lectura de su discurso en la jornada inaugural del año judicial del Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano. «Gracias a todos, he preparado un discurso, pero soy incapaz de leerlo por culpa de una bronquitis», ha argumentado el Papa en unas declaraciones que recogen varias agencias. El Papa ha aprovechado la jornada para hacer un llamamiento para buscar siempre la verdad.
No es la primera vez esta semana que el líder de la iglesia pide a un colaborador que lea su discurso. Ciampanelli también leyó un texto del Papa este viernes. El líder eclesial ya sufrió una bronquitis a finales de noviembre pasado que lo tuvo ausente de algunos actos importantes y anuló algunos de sus viajes. Francisco I ha demostrado ciertos síntomas de debilidad estos últimos meses, hecho que se junta una gripe, de la cual que todavía se recupera. El Papa se ha sometido recientemente a unas pruebas médicas que desde el Vaticano enmarcan en «controles rutinarios». Ante el episodio gripal, sus colaboradores han aclarado estos días que el pontífice «se encuentra bien».
El Papa carga contra la «ideología de género»
En el discurso del pasado viernes, Francisco ha cargado, como ya lo había hecho en otras ocasiones, contra la «ideología de género». El líder de la Iglesia católica cree que es una ideología «peligrosa» que «anula diferencias». El pontífice alega que todo ello «borra la humanidad». Unas declaraciones que vienen del que se considera uno de los papas más abiertos que ha tenido la iglesia y que no han gustado a ciertos sectores de la sociedad. El Vaticano tiene previsto sacar un documento, en los próximos días, con su opinión sobre los cambios de sexo, los vientres de alquiler y la ideología de género.
