Cataluña vive un fin de semana marcado por las temperaturas extremadamente altas para ser el mes de junio provocadas por la primera ola de calor del año. Se espera que durante el día los termómetros vuelvan a superar la barrera de los 40 °C en el interior del Ebro, Campo de Tarragona, Poniente, interior de Girona y puntos del Ampurdán. Desde el servicio de Protección Civil alertan que esta situación de calor extremo en gran parte de Cataluña puede prolongarse más de lo previsto, ya que las previsiones meteorológicas indicaban que la ola de calor llegaría hasta el martes, un hecho que ahora señalan que se puede extender hasta el miércoles. Es decir, las previsiones señalan que la ola de calor durará más de lo previsto y Cataluña vivirá una jornada más de calor intensa.
Hasta el mediodía, concretamente a las 13:30 horas, se han registrado temperaturas muy cercanas a los 40 grados en Aldover, donde se han cifrado 39,7 °C. En otras poblaciones de Cataluña los termómetros han alcanzado los 39 grados en Benissanet, los 38,9 en el pantano de Siurana, los 38,8 en Fornells de la Selva y los 38,6 en Sant Salvador de Guardiola y también en Vinebre, el Montmell y Torroja del Priorat, tal como han indicado los datos de las estaciones del Servicio Meteorológico de Cataluña (Meteocat). Las previsiones indican que la ola de calor dará una pequeña tregua en las tierras del Ebro, pero alertan que el calor podría aumentar en zonas de Tarragona y del prelitoral central.
Las noches, marcadas por un gran calor
La ola de calor en Cataluña ha hecho que Cataluña haya vivido una nueva jornada de noche con mínimas tropicales (temperaturas que superan los 20 grados) y tórridas (temperaturas superiores a los 25 grados) en muchas de las localidades costeras del país. Especialmente altas se han registrado en las estaciones de Portbou (29,8 °C), Barcelona-Raval (26,8 °C) y Badalona-Museu (26,4 °C).

Desde Protección Civil piden que los ayuntamientos catalanes hagan una previsión de lugares frescos o salas con aire acondicionado por si son necesarias para combatir el calor y que se tenga especial vigilancia de los colectivos más vulnerables como son las personas mayores de 75 años sin apoyo familiar o sin recursos; personas con discapacidades físicas o psíquicas y limitaciones de movilidad; personas que deban permanecer o hacer actividad física al aire libre y personas con enfermedades crónicas.