Protección Civil de la Generalitat ha comunicado este domingo alrededor de las 12.40 horas que un tren Euromed se ha quedado parado a Tarragona con 250 pasajeros al intercambiador de Boella, a Reus. Esta incidencia, según ha informado el cuerpo de emergencias, no afecta a la circulación de los trenes de alta velocidad.
También ha detallado que pronto llegará otro tren para poder hacer el transbordo y solucionar la situación, pero se ha activado la prealerta Ferrocat. El problema, según han detallado fuentes de Renfe a este diario, radica en una avería mecánica del mismo tren y todos los viajeros han sido informados de la situación al momento.
Las mismas fuentes han añadido que el tren para hacer el transbordo ya se ha enviado desde Barcelona. Además, la empresa ha activado el compromiso voluntario de puntualidad para que los viajes obtengan la devolución del billete que, en el caso del Euromed, es del 50% si hay un retraso superior a 30 minutos y del 100% si el retraso supera la hora.
Cuarta incidencia ferroviaria en una semana
Este es lo cuarto incidente de la semana en la red ferroviaria de Cataluña. El primero se produjo martes, cuando se cortó la circulación ferroviaria entre Móra la Nova (Ribera de Ebro) y Reus (Baix Camp) por el descarrilamiento de un tren de mercancías en Marçà-Falset. El corte afectó la línea R15 de Cercanías.
El día siguiente, un pequeño incendio originado entre las vías del alta velocidad obligó a cortar la circulación ferroviaria de la línea R4 de Cercanías entre las estaciones de l’Arboç y Sant Vicenç de Calders. Esta semana también se ha producido una incidencia al túnel de Plaza de Cataluña, que provocó retrasos de media hora en los trenes de todas las líneas de Cercanías: R1, R2, R2 Norte, R3 y R4.
A raíz de esta retahíla de averías, el presidente del Gobierno, Pere Aragonès, ha urgido el gobierno español a hacer efectivo el traspaso de Cercanías, que considera una «necesidad». Estas incidencias, según él, “evidencia la falta de inversiones” y “la incapacidad de gestión” del gobierno español y se ha comprometido a tomar las medidas que haga falta “ante el follón permanente”.
