El consejero de Educación del nuevo gobierno de PP y Vox en el País Valenciano, José Antonio Rovira, tiene la intención de dar un golpe fuerte sobre la mesa y prevé que el catalán deje de ser lengua vehicular en las escuelas de las ocho comarcas castellanohablantes de la comunidad, es decir, tiene la intención de desterrar el catalán de las aulas. Rovira, que ha asumido la cartera este mismo jueves, ya ha anunciado que abordará la cuestión del plurilingüismo para hacer «algunas modificaciones».
La justificación que usa el nuevo consejero valenciano es que el sistema lingüístico actual de estas ocho comarcas es «incongruente» porque, por un lado, la Ley de uso y enseñanza prevé la exención de estudiar la asignatura de catalán -allí referido como valenciano- en las comarcas Alt Palància, Plana d’Utiel, el Rincón de Ademuz, la Foia de Bunyol, la Vall de Cofrents, els Serrans, la Canal de Navarrés y Baix Segura, mientras la Ley de plurilingüismo prevé una cuota del 25% de la enseñanza en esta lengua en todo el territorio. Escudándose en este motivo, Rovira ha explicado que el primero que hará es «un planteamiento global», a pesar de que asegura que lo hará con «tranquilidad».

Respetar la decisión de las familias
Para sacar un poco de hierro de la cuestión, el nuevo consejero también ha querido remarcar que su reforma lingüística tendrá mucho en cuenta la libre elección de los padres y asegura que estará «mucho por encima de imposiciones». En unas declaraciones a medios después de obtener el control de la consellería, Rovira también ha querido dejar claro que en el nuevo modelo tendrán un papel destacado los consejos escolares, puesto que considera que son «los que más conocen la realidad de cada lugar». De hecho, en estos momentos, ya son los consejos escolares quienes determinan cuál es la lengua con la que se imparten el resto de clases.