La bajada de las pruebas PISA, especialmente en matemáticas y comprensión lectora, ha puesto en alerta el Departamento de Educación, todavía en manos de la consejera Anna Simó. Para paliar las carencias de los alumnos, de cara en el curso que viene, la consejería ha puesto en marcha un plan que aplicará, de momento, en 200 centros de Cataluña. Concretamente, 120 de primaria y 80 de secundaria. El departamento acompañará los docentes de estas escuelas para que puedan destinar dos horas en la semana del horario lectivo de los alumnos a mejorar las matemáticas a través de la experimentación. Para hacerlo, la consejería hará llegar una maleta equipada con material manipulable para que los alumnos puedan trabajar en las competencias matemáticas que más los cuestan. Es decir, según los resultados de las pruebas PISA, a primaria incidir en aspectos concretos de numeración y cálculo; espacio, medida y gráfica; y relaciones y cambio, mientras que, a secundaria, incidir en sentido numérico y en sentido espacial y de medida.
Además de recibir esta maleta con material manipulable, desde Educación también aseguran que se harán programaciones y guías para que los alumnos de 4.º y 5.º de primaria y 1.º o 2.º de ESO de los centros participantes puedan destinar dos de las cuatro horas de gestión autónoma a fortalecer las matemáticas. Fuentes del departamento han asegurado este miércoles por la mañana han explicado que trabajan para crear un perfil profesional de esta materia específico para primaria y que pretenden elaborar una guía curricular con los criterios de evaluación por ciclo. A estas alturas, este plan de mejora se impulsará en solo 200 centros educativos de Cataluña, pero todavía no se ha decidido qué. Para hacerlo, el mes de junio la consejería abrirá una convocatoria en que todas las escuelas puedan presentarse, y un mes después, el departamento dará el veredicto de qué escuelas son las escogidas para implementar este modelo de acompañamiento.

Paliar las carencias en competencia lectora
Dejando de banda las matemáticas, Educación también ha impulsado un plan para abordar otra de las grandes carencias del alumnado catalán: la comprensión lectora. Entre las diversas medidas que la consejería implementará el próximo curso, se creará una red para trabajar este aspecto que se implementará en 250 centros, de entrada. El funcionamiento para escoger las escuelas que formarán parte de esta red es muy similar al de las matemáticas: los centros participantes tienen que mostrar interés para participar, un 80% de los docentes del centro se tienen que comprometer a formar parte de la red y tener una biblioteca escolar activa serán los requisitos que se tendrán en cuenta. El programa tendrá una duración de dos años.
El primer año se trabajará la fluidez, el vocabulario y los contenidos, la descodificación y las estrategias de comprensión a través de plenarios con los representantes de los centros y en sesiones dinamizadas en las escuelas por parte de los representantes. Todo ello se complementará con el asesoramiento de los coordinadores de lengua (LIC) que ya hay en los centros. Una vez finalizada esta primera etapa, el segundo paso implica la creación de una red para incidir en la oralidad.

