Más presión judicial al PSOE. Siguiendo la petición del fiscal anticorrupción, Alejandro Luzón, que en su escrito de acusación solicitaba la posibilidad de ordenar prisión a los investigados del caso Mascarillas, el juez ha dado el paso. Así, el magistrado de la sala penal del Tribunal Supremo, Leopoldo Puente, ha dictado un auto, de seis páginas al que ha tenido acceso El Món, convocando al exministro José Luis Ábalos y su exasesor Koldo García Izaguirre, para el próximo 27 de noviembre.
El objetivo es celebrar la comparecencia prevista en el artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, para decidir si agrava las medidas cautelares de los dos procesados y ordena la prisión provisional hasta que se celebre la vista. Ambos deben acudir personalmente y asistidos por defensa. De esta manera, Puente cumple no solo con la solicitud de la fiscalía sino también con las acusaciones populares personadas en el caso.

Demanda de penas altas de prisión
El debate sobre si es necesario encarcelar a Ábalos y García se basa, sobre todo, en las altísimas penas de prisión que solicita la fiscalía. En concreto, el ministerio público reclama 24 años de prisión para el exministro José Luis Ábalos, por los cinco presuntos delitos que se le atribuyen -pertenencia a organización criminal, soborno, tráfico de influencias, malversación y uso de información privilegiada- por su supuesta participación en el caso mascarillas. Es decir, la compra a cambio de comisiones de material sanitario durante la pandemia. También ha reclamado que se le imponga una multa de 3,9 millones de euros.
Al exasesor de Ábalos, Koldo García, se le reclama 19 años y medio de prisión, por los mismos delitos de Ábalos y la misma multa, y para el empresario Víctor de Aldama, 7 años de prisión, aplicándole la atenuante de confesión, así como una multa de 3,8 millones de euros. Por ello, el ministerio público no le reclama la prisión provisional.

