El presidente del gobierno español está pasando unas horas delicadas. A media mañana Junts ha anunciado que suspendía las negociaciones ordinarias con el PSOE y que se convocaba una reunión de carácter «urgente» de la mesa de Suiza, pero este no ha sido el único sobresalto que se ha llevado Sánchez, ya que pocas horas más tarde el CIS ha recortado la distancia entre los socialistas y el PP, y los populares han exigido que se convoquen elecciones porque «el gobierno está muerto».
Durante el 34º Congreso del PSOE de Asturias Sánchez ha esquivado cualquier tipo de referencia a Junts o al presidente en el exilio, Carles Puigdemont. En cambio, sí que ha aprovechado su intervención para saltar a la yugular de sus adversarios políticos y ha hecho un llamado a obviar el «ruido» que desde PP y Vox están levantando respecto a la posición de Junts frente a los socialistas. Según Sánchez el mensaje de que «España se rompe» es falso y si «bajamos un poco el volumen y atendemos los datos» se evidencia que «España vive uno de sus mejores momentos de la historia en crecimiento económico, empleo, cohesión social y territorial, convivencia y proyección internacional».
Presumiendo de la situación del Estado español
Lejos de acobardarse, el presidente español ha presumido de los éxitos económicos del ejecutivo socialista y ha asegurado que «cuanto mejor le vaya a España más ruido harán el PP y Vox, pero ellos mismos». Para terminar de presumir, Sánchez ha querido recordar que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha elevado las perspectivas de crecimiento del Estado para el 2025 al 2,3% y ha asegurado que ser socialista en pleno 2025 «es estar del lado correcto de la historia».
