La sala de máquinas del PSOE trabaja sin descanso para proteger a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, del caso Koldo e intenta contener las “responsabilidades políticas” en el exministro José Luis Ábalos, que ahora está en el Grupo Mixto. El gobierno de las Islas Baleares compró mascarillas por valor de casi cuatro millones de euros a la empresa implicada en la trama de comisiones ilegales que amenaza con crear una grave crisis en el PSOE y en el gobierno español. Según las últimas informaciones aparecidas, su ejecutivo habría certificado el contrato con la empresa Solucionas de Gestión a pesar de saber que las mascarillas eran defectuosas, un trámite que permitió a la compañía investigada continuar optando a concursos públicos.
El lote de mascarillas defectuoso no se pudo utilizar, pero el gobierno balear no reclamó el dinero hasta tres años después. Según el PSOE, el ejecutivo de Armengol abrió un expediente antes de irse y acusan al actual gobierno de Marga Prohens (PP) de haber “dejado caducar” la reclamación. La Audiencia Nacional asegura que Ábalos fue “el intermediario” que la trama usó para frenar el expediente administrativo del gobierno balear. Ni Ábalos ni Armengol están investigados, pero la aparición de sus nombres en la causa ha sido aprovechada por los populares para intentar crear dudas sobre la implicación de los dirigentes socialistas y, de paso, generar inestabilidad en el gobierno de Pedro Sánchez.

El entorno de Armengol ha negado que la presidenta del Congreso no habló nunca de las mascarillas con Ábalos y que en ningún caso recibió presiones para retirar la reclamación por el material sanitario defectuoso. Además, insisten que Armengol ha reclamado en el gobierno de Prohens que continuara adelante con el expediente y se preguntan por qué los populares lo han guardado en un cajón hasta que ha decaído.
El PP pide la dimisión de Armengol
El PP ha pedido la dimisión inmediata de la presidenta del Congreso y aseguran que el gobierno autonómico que presidía “fue conocedor y colaborador activo de una presunta estafa”. Fuentes populares acusan a Armengol “de aceptar y pagar material sanitario defectuoso, a pesar de saber que no protegía de la Covid y ponía en riesgo la vida de quien las utilizaba”. También señalan que las mascarillas se pagaron con fondos europeos a pesar de estar “prohibido” y almacenó las mascarillas a pesar de saber que era “inservible”. Los populares están convencidos de que Armengol abrió el expediente para reclamar el dinero justo antes de marchar para “protegerse políticamente”. En los últimos días, se ha sabido que la Fiscalía Anticorrupción ha enviado a la Fiscalía Europea los contratos del caso Koldo que las Islas Baleares y las Islas Canarias pagaron con fondos europeos.