Gran Hermano VIPno ha empezado con muy buen pie. Con la presentadora Marta Flich al frente, los concursantes están enfadados porque consideran que el equipo directivo está jugando con ellos. La primera norma que les sorprendía era que les dijeran que había un famoso infiltrado que, en realidad, no es concursante de esta edición. Pedro García Aguado tendrá que intentar que los compañeros no lo descubran, ya que será en aquel momento cuando se acabe esta experiencia para él. Pero dejando de banda este cambio en la mecánica, lo que tampoco les gusta es sentir que les están manipulando.
En el debate de domingo, el reality mostró un recopilatorio de los peores momentos de la convivencia del grupo con menos beneficios. El objetivo era claro, que los privilegiados sintieran pena y aceptaran el trato que les ofrecieron: renunciar a 3.000 € del premio a cambio de enviar una cesta con comida a los rivales. Todos coincidieron que era lo mejor, aunque después dejaron claro que los habían colocado entre la espada y la pared: «Yo creo que solo nos han mostrado imágenes en las que se encontraban mal. Y, está claro, ante toda España no puedes decir que no les quieres ayudar porque esto te convierte en el más mezquino», reflexionaba Aguado sobre esta manipulación.
Problemas los primeros días deGH VIP| Telecinco
Pedro García Aguado y Laura Bozzo, contra la dirección de GH VIP
Esta teoría también ha recibido el apoyo de Laura Bozzo: «Dices que no y te linchan… No entienden nada. No estamos jugando entre nosotros, estamos jugando con un cerebro privilegiado que está detrás». Y el Hermano Mayor añadía: «Este es el que nos está manipulando. Este es un favor con reticencias porque hemos decidido por ellos seis». Y la otra aplaudía su valentía: «Lo que sentimos extraño es que nos toquen el corazón para rebajar el premio final. Una cosa es solidaridad y otra que sentimos que están jugando con nosotros».
Unas acusaciones muy duras, pero fundamentadas a simple vista. Es probable que acaben teniendo una sanción disciplinaria por haber dicho esto públicamente, pero de momento nadie se ha pronunciado al respeto.