Raquel Mosquera atraviesa un momento complicado porque han encarcelado a su esposo y prácticamente no tiene información sobre su estado. En un primer momento, solo sabía que lo habían retenido en Francia y no podía salir del país. Ahora, ha podido saber que se encuentra dentro de un centro penitenciario desde hace cuatro meses, aunque asegura que no quieren especificarle en cuál ni por qué está allí dentro. ¿Qué hay de cierto en toda esta historia turbia y con mala pinta? La peluquera, muy famosa en el mundo de la prensa rosa porque es la exesposa de Pedro Carrasco, ha dado más detalles de un caso que mantiene con mucha curiosidad a los más curiosos.
La Razón ha podido hablar con fuentes cercanas a la pareja, quienes le confirman que Raquel ya ha podido localizar a su esposo. Actualmente, se encuentra retenido en el centro penitenciario de Fresnes, en las afueras de París. La peluquera ha contratado un abogado francés para que se encargue del caso e intente conseguir la libertad para su esposo, de quien aún no se sabe bien qué ha pasado. Las últimas publicaciones dicen que tendría que ver con un caso relacionado con las drogas, pero a ella «le cuesta creer» que sea cierto. ¿Otra de las teorías? Que Isi tenga otra familia allí, una posibilidad que ella ha negado tajantemente.

Raquel Mosquera, «preocupada y temerosa» por el encarcelamiento de su esposo
Ahora bien, todos los que la conocen coinciden en que está «muy preocupada» y «temerosa» de que el tema sea tan serio que implique que su esposo deba estar encarcelado unos cuantos años. Raquel Mosquera no aportó prácticamente ninguna información en las declaraciones que concedió a ¡De Viernes!, un programa en el cual demostró que no tiene ni idea de la verdadera situación del nigeriano. ¿Han pasado casi cuatro meses desde que le impidieron salir del país y aún no sabe nada?
Explican desde varios medios que la prisión que han escogido para el esposo de Raquel Mosquera no es cualquiera, sino que se la denomina como la prisión de los horrores. La usaban los nazis para torturar y asesinar a resistentes franceses y espías británicos, dicen, hasta el punto de que allí dentro hubo un montón de militares e independentistas argelinos o presos vascos. Si realmente han privado de libertad al esposo de Raquel Mosquera por un tema de venta de drogas, seguramente acabará sabiéndose. Ella mantiene su silencio y opta por no conceder declaraciones, pero la expectación es máxima.

