Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton tienen un destino decidido desde que se casaron. Serán los próximos reyes de Inglaterra en el momento en que Carlos III de Inglaterra deje el trono. Además de formar una familia numerosa con sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, que también acabarán cumpliendo con la obligación hereditaria que les corresponde. Su decisión de priorizar la familia también les ha provocado más de una crítica, como el hecho de rechazar vivir en el Palacio de Buckingham para poder vivir cerca de su residencia actual y así continuar con sus actividades cotidianas con los hijos, como poder llevarlos a la escuela.
La familia está bajo el foco en todo momento, una de las consecuencias de su posición social. De hecho, desde que el año pasado se anunció que Kate Middleton había recibido un diagnóstico de cáncer, todos han estado muy pendientes de los cambios y las informaciones publicadas. De la misma manera, Guillermo de Inglaterra ha sido su máximo apoyo, pero en un hipotético caso de que el matrimonio se separara, como ocurrió con Diana de Gales, ¿qué pasaría? María José Gómez Verdú, experta en protocolo, analiza las claves en la revista Lecturas.

¿Cómo sería el divorcio de Kate Middleton y Guillermo de Inglaterra?
¿Quién tendría la custodia de los hijos? ¿Se quedaría sin privilegios o continuaría vinculada con la monarquía británica? Según explica la experta, la situación sería muy diferente de la que vivió Lady Di. «El contexto institucional, social y jurídico ha cambiado de manera considerable, y las experiencias pasadas de la monarquía británica también han servido de aprendizaje». En el caso de la custodia, sin embargo, apunta que ambos progenitores serían los responsables de sus hijos de manera legal, pero con un fino matiz. «En virtud de normas históricas que aún tienen peso en la monarquía, la patria potestad de los menores de la Familia Real pertenece, en última instancia, al monarca reinante», apunta Verdú.
Sea como sea, Kate continuaría teniendo un papel importante, aunque las decisiones más importantes deberían tener «la aprobación del rey». Esto se traduce en que de manera práctica Kate tendría un papel activo «pero jurídicamente estaría condicionada por la institución«, expone.

¿Qué pasaría con sus títulos?
Kate Middleton, desde que entró en la familia real británica, ha conseguido dos títulos, princesa de Gales y duquesa de Cambridge. En caso de separarse de Guillermo de Inglaterra, existe la posibilidad de que pueda mantenerlos si no se casa de nuevo, pero en todo caso, «el estatus sería similar, aunque su posición pública podría verse protegida por el hecho de ser la madre de un futuro rey». Esto estaría muy relacionado con una idea de «salvar la imagen de la Corona» y mostrar estabilidad para que esto no les afecte a nivel de opinión pública.
En cuanto a los actos públicos, Kate continuaría teniendo un rol significativo. «Kate continuaría participando en actos vinculados a sus hijos y a las causas que ha impulsado, aunque con un rol más limitado y sin la representación oficial que hoy ejerce como consorte». Sea como sea, parece que los próximos monarcas británicos no tienen planes de separarse.