La tregua de 30 horas anunciada por Rusia en el conflicto con Ucrania no se estaría cumpliendo. Así lo ha denunciado este sábado el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, quien ha asegurado que los ataques continúan en la zona a pesar de este alto el fuego humanitario decretado por su homólogo ruso, Vladímir Putin.
En un comunicado difundido a través de las redes sociales justo después de recibir el último informe de situación procedente del frente, Zelenski apunta que solo en las últimas horas se han registrado hasta 59 nuevos bombardeos y cinco operaciones de asalto por parte de unidades rusas. En concreto, ha detallado que los ataques se habrían producido en Starobilsk, Donetsk, Pokrovske, Novopavlivske y Zaporiyia. «En todas partes, nuestros guerreros responden como corresponde al enemigo, según la situación de combate específica», ha dicho el mandatario que ha advertido que «Ucrania continuará actuando de forma simétrica», remarca en el mensaje.

El presidente ucraniano acusa al ejército ruso de intentar crear «una impresión general de un alto el fuego, mientras en algunas zonas persisten intentos aislados de avanzar y causar bajas en Ucrania». Asimismo, ha exigido a Rusia que cumpla «plenamente» las condiciones de la tregua. En el mensaje publicado, Zelenski ha insistido que la propuesta de Ucrania de implementar y extender el alto el fuego durante 30 días «continúa sobre la mesa». Con todo, ha avisado que el ejército ucraniano «actuará de acuerdo con la situación real sobre el terreno».
A report by Commander-in-Chief Syrskyi on the frontline as of 6:00 a.m.
— Volodymyr Zelenskyy / Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) April 20, 2025
Across various frontline directions, there have already been 59 cases of Russian shelling and 5 assaults by Russian units. In the sector of the Starobilsk Operational Tactical Group, one combat engagement…
Preparados para responder cualquier violación o provocación
Es necesario recordar que este anuncio llega después de que Putin anunciara este mismo sábado, de manera unilateral, una breve tregua a las hostilidades en Ucrania con motivo de las conmemoraciones de la Pascua y con el propósito de calibrar la «sinceridad» del gobierno de Kiev de cara a unas posibles negociaciones de paz. A pesar de este giro conciliador, el presidente ruso ya advertía en su primer mensaje que los militares rusos debían estar «preparados para repeler cualquier posible violación del alto el fuego, cualquier provocación del enemigo, cualquiera de sus acciones agresivas». «Esperamos que la parte ucraniana siga nuestro ejemplo», añadía.