Finalmente, el gobierno de los Países Bajos ha caído. La piedra angular de la dimisión del gabinete han sido los desacuerdos en materia de política migratoria. Después de días de reuniones, el gobierno ha acabado saltando por los aires este viernes por la noche, por lo cual el país está abocado a unas elecciones anticipadas a corto plazo. El encargado de anunciarlo fue el primer ministro, Mark Rutte, que en una rueda de prensa presentó su dimisión y la de todo su gabinete, presentada ya ante el rey, después de constatar que no hay consenso posible sobre el cual, a su juicio, representa un gran problema social. Las diferencias son “insalvables”, reconoció ante los medios.
El Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD) de Rutte había puesto sobre la mesa una propuesta para limitar la llegada de migrantes en los Países Bajos. Concretamente, el partido de derechas de Rutte quería imponer una medida que permitiría limitar la reunificación familiar para evitar situaciones de colapso como las de 2022, cuando grupos de migrantes durmieron al raso a Ter Apel.
Ante esto, sus socios de gobierno, Demócratas 66 y Unión Cristiana, se mostraron completamente en contra y ya habían expresado su oposición públicamente a la norma. Aun así, aunque el primer ministro matizó que la ruptura no se debe tanto en la salida de un partido en concreto como el entendimiento común, porque no había vía posible para mantener la actual coalición.
“No era ningún secreto que los cuatro partidos teníamos diferentes posiciones sobre este tema”, aseguró Rutte, que también defendió; sin embargo, que todas las partes han hecho el posible para tratar de salvar la alianza. En este sentido, negó que su formación haya elevado en los últimos días sus exigencias sobre la cuestión de la reunificación.
Rutte puerta siente primer ministro de Países Bajos desde el año 2010 y lideraba su cuarto gabinete, que tomó posesión el enero de 2022 después de diez meses de arduas negociaciones postelectorales. El actual gobierno seguirá de manera interina y el primer ministro avanzó que tiene energías suficientes para seguir como líder del VVD, aunque añadió que ahora tendrá que consultar con la dirección del partido el camino a seguir. En próximos días se definirán los próximos pasos en Países Bajos, aunque los plazos legales auguran que los comicios tendrán lugar en principio el mes de noviembre.