Los Mossos d’Esquadra han desarticulado una banda que se dedicaba a vender droga a través de máquinas expendedoras en diversas poblaciones catalanas. Según ha informado la policía catalana, este miércoles se han hecho varios registros que han acabado con la detención de 17 personas vinculadas con la trama. Agentes de la División de Investigación Criminal (DIQUE) de la Región Policial Metropolitana Norte han detenido a dos hombres y a una mujer que tenían una empresa que se dedicaba a producir cáñamo con fines industriales y a fabricar y distribuir productos derivados de esta planta, que son legales, a través de máquinas expendedoras. En realidad, los tres detenidos utilizaban la red para distribuir marihuana y hachís que disfrazaban como CBD.
En el operativo de esta mañana, los Mossos han hecho tres entradas con orden judicial en domicilios y un local del Maresme, donde han detenido a los tres responsables de la empresa, y han hecho 16 inspecciones administrativas a establecimientos que tenían máquinas expendedoras o expositores con la droga. Durante las inspecciones han detenido a 14 personas más, todas como responsables de los locales donde se vendía la droga, pero su detención quedará sin efecto en las próximas horas, cuando hayan declarado en la comisaría. Los agentes han intervenido unas 1.000 cajas con cogollos y resina y unos 7.000 euros en metálico. También se han precintado tres máquinas expendedoras.

La investigación se puso en marcha cuando los Mossos detectaron un envío de cogollos de marihuana a las instalaciones de la empresa. Los investigadores hicieron varias inspecciones a locales con máquinas expendedoras y descubrieron que vendían paquetes de tabaco falsos donde escondían marihuana y hachís. A partir de aquí tiraron del hilo y localizaron máquinas expendedoras en el Maresme, la Selva, el Vallès Occidental, Barcelona y el Baix Llobregat. El resultado de las analíticas permite concluir que se comercializaba THC a través de máquinas expendedoras que alquilaban a una empresa.